Lapsus mentales, orales y equivocaciones en la vida diaria.

Lapsus mentales, orales y equivocaciones en la vida diaria.

Breve reflexión sobre la obra “Psicopatología de la vida cotidiana”

EFRÉN FRANCISCO RUIZ RANGEL

Resumen

Durante el siguiente texto se pretende hacer un análisis y reflexión desde una perspectiva personal sobre una de las obras más leídas de Sigmund Freud en el cual intenta dar una explicación psicoanalítica sobre los distintos momentos en que sufrimos algún olvido (lapsus) ya sea de nombres propios, extranjeros, equivocaciones tanto orales como escritas, actos fallidos y supersticiones motivado en la mayoría de las ocasiones por un recuerdo o suceso desagradable almacenado en el inconsciente reprimidos hasta que alguna asociación externa ayude al recuerdo de cierto acontecimiento. De igual manera se anexan ejemplos que facilitan una mejor comprensión sobre cada categoría anteriormente mencionadas de lapsus y errores relacionándolos con sucesos cotidianos.

Palabras clave: Lapsus, equivocaciones orales, equivocaciones escritas, represión.

La teoría del olvido

La mente humana ha sido un tema de debates e investigaciones durante décadas, intentando explicar lo más posible su funcionamiento desde diversas teorías psicológicas y neuropsicológicas. Sigmund Freud creador del psicoanálisis hizo diversos aportes proponiendo conceptos como el inconsciente, el aparato psíquico, la libido entre otros. Acerca de la teoría del olvido realizo la obra “Psicopatología de la vida cotidiana” exponiendo ejemplos tanto personales como con la contribución de otros autores colegas en materia psicoanalítica.

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1 Freud, Sigmund. Psicopatología de la vida cotidiana. España, Alianza Editorial, S.A., 2015. p. 12.

Sobre los olvidos y su posible origen

Como seres humanos somos susceptibles a sufrir algún olvido de un nombre o hecho, como olvidar el nombre de algún vecino u olvidar el sitio en donde pusimos las llaves por última vez y en un esfuerzo por recordar traemos todas aquellas primeras impresiones que se nos vienen a la mente consciente descartándolas de inmediato por considerarlas como erróneas al no encajar con la palabra deseada. Este hecho no implicaría únicamente un fallo del aparato psíquico para Freud, por el contrario, estas ideas tendrían algún grado de similitud o asociación de lo olvidado.

“[…]  tal desplazamiento no se halla a la merced de un mero capricho psíquico cualquiera, sino que sigue determinadas trayectorias regulares y perfectamente calculables, o, por decirlo de otro modo, presumo que los nombres sustitutivos están en visible conexión con el buscado…” 1

A menudo vivimos acontecimientos que quizás resulten desagradables o indeseables a causa de temor, vergüenza o quizás incertidumbre que intentamos olvidar a toda costa, sin embargo, el olvido absoluto no tiene una existencia comprobada a menos de que se trate de amnesias clínicas pero hablar de ello sería desviarse del objetivo central de esta reflexión de manera innecesaria y extensa; empero a esto, éstas situaciones indeseables quedan reprimidas en lo más profundo del inconsciente generando una serie de asociaciones causando que otros recuerdos se vean afectados, para entender mejor lo expuesto anexo la siguiente cita como ejemplo:

“Un cierto señor Y. se enamoró, sin ser correspondido, de una señorita, la cual se casó poco después con el señor X.  A pesar de que el señor Y. conoce al señor X. hace ya mucho tiempo y hasta tiene relaciones comerciales con él, olvida de continuo su nombre, y cuando quiere escribirle tiene que acudir a alguien que se lo recuerde.” 2

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