Modelos De Intervencion Psicopedagogica

INTRODUCCIÓN

El siguiente trabajo que forma parte de la materia de Observación y Práctica Psicopedagógica II y trata sobre los distintos modelos de estudio e intervención. La actividad consiste en revisar un video en el cual se exponen algunos problemas de conducta en niños, su causa, como prevenirlos y el tratamiento a seguir. Esto se hace con el objetivo de analizar y conocer algunos de los trastornos conductuales, emocionales y cognitivos más frecuentes que se presentan en la infancia y adolescencia, empezando por su etiología, las acciones de prevención como orientación a padres, maestros o la escuela y el tratamiento que se debe seguir para superar estos padecimientos.

REPORTE DEL VIDEO

Los trastornos que con más frecuencia se presentan en la infancia y en la adolescencia se dividen en dos clasificaciones o tipos por así decirlo, por un lado están aquellos de carácter emocional y por el otro los conductuales.

Dentro de los emocionales destacan la ansiedad y la depresión, los cuales son definidos de la siguiente manera:

• Ansiedad: “anticipación aprensiva de un peligro o desgracia futuro acompañada de un sentimiento de malestar o síntomas somáticos de tensión”. (DSM-IV)

• Depresión: “trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración”. (Organización Mundial de la Salud)

En cuanto a los que son de carácter conductual, se destacan los siguientes:

• Hiperactividad: “trastorno del comportamiento caracterizado por distracción moderada a grave, períodos de atención breve, inquietud motora, inestabilidad emocional y conductas impulsivas. Tiene una respuesta muy alta al tratamiento, aunque se acompaña de altas tasas de comorbilidad psiquiátrica”. (DSM-IV)

• Trastorno de comportamiento perturbador: “incluye trastornos caracterizados por un comportamiento negativista desafiante que no cumple los criterios de trastorno di social ni de trastorno negativista desafiante. Por ejemplo, incluye cuadros clínicos que no cumplen todos los criterios ni de trastorno negativista desafiante ni de trastorno disocial, pero en los que se observa deterioro clínicamente significativo”. (DSM-IV)

El origen o causa de estos trastornos puede ser tanto de origen genético, como de carácter ambiental y social, siento estos dos últimos los que se trabajan dentro del campo de la psicología estudiando cuales son las actividades y pautas que se pueden aplicar cuando se presentan este tipo de problemas o padecimientos.

Es importante saber que este tipo de padecimientos como ansiedad, depresión, fobias, estrés, entre otros; no son exclusivos de adultos, se pueden presentar en cualquier etapa de la vida y que hacer un diagnóstico e iniciar con terapias de manera temprana es fundamental para lograr que el paciente pueda recuperarse.

Como en la mayoría de los padecimientos o problemas de salud, ya sea de afectación física, psíquica o social, los métodos y procedimientos cambian según el caso. Por ejemplo, el procedimiento para atender a un paciente con cáncer no es igual que el que se sigue para uno que padezca un problema de carácter vascular.

Lo mismo sucede con los trastornos de carácter psicológico y a su vez lo mismo sucede con los trastornos de audición y lenguaje, no se hacen las mismas actividades y ejercicios con pacientes afásicos que con aquellos que solo presentan una dislalia simple.

En cuanto a los trastornos que nos presenta el video, cuando estos son de origen emocional, las primeras pautas que se siguen son aquellas en las cuales se orienta a la familia y escuela, en donde se recomienda que el ambiente que rodea al niño sea lo menos propicio para el desarrollo del problema en cuestión, es decir, crear o hacer que el contexto del niño se vuelva más amigable, social, que hay mayor convivencia entre los padres con el paciente y que este a su vez tenga más interacción con personas de su edad. Sin embargo, cuando el trastorno esta ya bien establecido en el paciente –por decirlo así. Es necesaria la intervención del profesional en el área, que en este caso sería el psicólogo y como cualquier afección o problema de salud, resulta importante que el diagnóstico sea certero, de esta manera la intervención terapéutica será más efectiva para el paciente.

Resulto de mi interés en donde se explican que los síntomas del trastorno de déficit de atención e hiperactividad, deben de presentarse en varios contextos o ambientes, como en el entorno familiar y en el escolar para descartar que uno de estos ambientes sea el que este propiciando el problema. Es importante además, que en estudios recientes el factor genético tiene un peso mayor sobre el ambiental como causas de este tipo de trastorno.

Por otro lado se hace una descripción de la sintomatología de algunos trastornos de carácter emocional y conductuales, desde los primeros signos de alerta en la primera infancia hasta el momento en el que el niño acude a la escuela y el comportamiento que este tiene en ese lugar, además se hace un ejemplo de como la mamá sin conocer el problema de su hijo refuerza esta conducta del niño. Otro punto interesante es el tema de la variable de sensibilidad a la ansiedad, en donde el paciente presenta temor a su propio problema y su sintomatología, haciéndolo más vulnerable al trastorno de ansiedad.

El estrés que rodea al niño o adolescente es otro factor de importancia para la aparición de este tipo de trastornos, el hecho de que la familia tenga un ambiente conflictivo, con constantes cambios tanto de lugar de residencia como de colegio, padres que peleen constantemente o aquellos que están en

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