Monografia del Autismo ¿Qué es autismo y a qué desorden pertenece?

Introducción

        Durante la niñez temprana  el cerebro del niño se adapta y cambia constantemente. Es por esto que los padres tienen el deber de velar y cuidar para que ese niño se desarrolle de manera óptima.  Esto se logra proveyendo los estímulos, el ambiente y la educación  necesaria para que cada etapa de su vida se desarrolle al máximo y logre convertirse en un individuo funcional. Los niños con autismo son niños que tienen derecho a  progresar y desarrollarse al máximo dentro de sus capacidades.  Hay un grupo de condiciones neurológicas y biológicas que afectan el desarrollo físico, emocional y cognoscitivo de un niño llamadas Trastorno Generalizado del Desarrollo. Estas condiciones son caracterizadas por retraso en el desarrollo social, de comunicación  y cognoscitivo.

        Según Baez (2015) en Puerto Rico existen alrededor de 7,000 casos reportados de niños y niñas menores de 18 años que padecen de autismo, aunque algunos expertos estiman que en realidad son alrededor de 11,000.  Debido a estas estadísticas  es importe que la sociedad se eduque y conozca más acerca sobre esta condición que tanto afecta a los niños.  A través del conocimiento nos podemos convertir en facilitadores de un proceso de integración en la sociedad para esta población.

¿Qué es autismo y a qué desorden pertenece? 

        La palabra autismo fue utilizada por primera vez por el psiquiatra suizo Eugene Bleuler en el 1908. Para diagnosticar la condición es necesario que lo haga un médico competente.  Este médico se deja llevar de los criterios que se establecen en El Manual Diagnóstico y Estadísticos de los Trastornos Mentales, DSM-V, por sus siglas en inglés, de la Asociación Americana de Psiquiatría. Existen un sin números de estudios que definen y determinan las posibles causas de diferentes condiciones y trastornos existentes. Dentro de la categoría de los desórdenes degenerativos, el autismo es el más conocido. Según la Organización Mundial de la Salud y la Asociación Americana de Psicología esta condición es diagnosticada bajo criterios enfocados en la socialización y comunicación de estos individuos.

        El autismo es un trastorno generalizado del desarrollo.  Se caracteriza por su desarrollo anormal de las funciones del cerebro que afecta y crea un rezago en las siguientes áreas: la interacción social, la comunicación o lenguaje utilizado en la comunicación social y juego simbólico o imaginativo, entre otras áreas de desarrollo, (Kaneshiro, 2014).  Dentro de este desorden se incluye el Síndrome de Asperger, el cual es un tipo de autismo de alto funcionamiento.  Es un autismo leve en el que apenas presenta características que no sean las de un niño normal. Muchos lo describen como un autismo sin retardo mental.               

        El autismo es un misterio al que todavía no se le ha encontrado una solución. Poco se sabe sobre la causa de que los niños no comprendan lo que sucede a su alrededor y sean impacientes o se encuentren tan distraídos que no pueden mirar a los ojos. Se sabe que esta condición está muy relacionada a problemas metabólicos e inmunológicos que afectan al sistema nervioso central en personas genéticamente susceptibles. 

        Algunos investigadores creen que el daño a una parte específica del cerebro, llamada la amígdala, podría estar implicado. Otros investigadores están estudiando si un virus puede desencadenar los síntomas. Algunos padres han escuchado que las vacunas inyectadas en los niños pueden causar el trastorno. Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos, informan que no hay ningún vínculo entre el trastorno y las vacunas. Algunos médicos creen que el aumento en el número de niños con autismo es debido al mejor diagnóstico y a las nuevas definiciones de autismo. 

¿Cuáles son las causas y las características que presentan los que tienen la condición?

             La mayoría de los padres de niños con autismo sospechan que algo no está bien. Esto ocurre alrededor de los 18 meses de edad, entonces es cuando buscan ayuda. Los niños con autismo se caracterizan por presentar problemas en: juegos actuados, interacciones sociales y comunicación verbal y no verbal. Algunos niños parecen normales antes del primer o segundo año de vida y luego presentan una regresión súbita y pierden las habilidades del lenguaje o sociales que habían adquirido anteriormente. 

        Algunas de las manifestaciones del síndrome son: poco o ningún contacto ocular,  falta de desarrollo o desarrollo atípico en el lenguaje, incapacidad para desarrollar relaciones con sus pares, falta de reciprocidad social, preocupación persistente por partes de objetos, movimientos de las manos o algunas partes del cuerpo de forma repetitiva, entre otras.  Se piensa que las vacunas podrían ser una causa de la condición debido a su alto contenido de mercurio.  Esto, por supuesto, no se ha evidenciado y está casi hasta descartado.

             Los casos más severos de autismo se caracterizan por una completa ausencia del habla de por vida, comportamiento extremadamente repetitivo, no usual, auto dañino y agresivo.   Generalmente, los autistas tampoco son muy hábiles físicamente y socialmente presentan una serie de problemas.  Otro de los síntomas comunes del autismo es la respuesta inadecuada a las sensaciones.  Se les afecta todos o algunos de los sentidos.  Pudieran presentar pérdida de visión o molestia ante mucha claridad. Les incomoda el ruido fuerte, son muy sensibles al tacto, equilibrio, audición y no pueden controlar la forma de manejar su cuerpo, (Baez, 2015).

Grado de inteligencia de los niños autistas

             Muchos de ellos son sumamente inteligentes y por lo tanto capaces de eludir un diagnóstico de autismo.  El autismo se separa de acuerdo al nivel de funcionamiento de estas personas.   Los que pertenecen al grupo de autistas de alto funcionamiento tienen en cociente intelectual de más de 70-80.  Los que se dice que son de bajo funcionamiento tienen de menos de 70-80.  La percepción de bajo funcionamiento por lo general se refiere  a la carencia del habla, incapacidad para cuidarse a sí mismos, entre otros.  No siempre coincide con el criterio de coeficiente intelectual.  Existen personas que carecen del habla con un coeficiente intelectual alto. Por otro lado, autistas con un coeficiente intelectual bajo podrían poseer la capacidad para hablar.

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