NOCHE ES JOVEN EN COCHABAMBA

LA NOCHE ES JOVEN EN COCHABAMBA

El tema llama la atención, el lugar que tiene la noche para la población joven en la ciudad de Cochabamba el espacio, el tiempo por ende la experiencia de la gente, por lo que escogimos la zona norte del municipio de Cercado y la zona este que abarca el municipio de Sacaba.

El libro de “La Noche es Joven” territorios juveniles en el centro paceño aborda temas acerca de la “particularidad” de los jóvenes en La Paz durante la noche, por lo que nos apoyamos en esta investigación para poder indagar algo en el tema de “la noche joven” en Cochabamba.

Nuestro objetivo es indagar acerca del sentido que los jóvenes otorgan a la noche; con la intención de reconocer si la noche es para encuentros de consumo, ocupar un espacio público y/o discurso que manejan, en el transcurso de la vida nocturna.

Para presentar y realizar el objetivo planteado recurrimos a la observación participante, por medio de la metodología de entrevistas, notas en un cuaderno de campo que se utiliza para la observación, apoyado también en fotos.

Desarrollo

La noche para los jóvenes en la ciudad de Cochabamba que se caracteriza por una urbe diversa, se desenvuelve con la asistencia a cafés-bar, boliches bailables, plazas, chicherías, locales clandestinos, es decir lugares de encuentro en el que puedan desarrollarse distintas maneras de ser joven para la realización de distintas actividades como ser culturales, teatrales, festejos de alguna ocasión, expresar sus preocupaciones como jóvenes, donde a simple vista resalta la mezcla de grupos, culturas, clases sociales. La generación juvenil marca características diferentes porque depende de la época en la que se desarrolla, pues adoptan conductas lenguajes, moda, modos lingüísticos, etc.

El etnocentrismo urbano nocturno tiende emocionalmente a expresar la cultura propia, el criterio exclusivo de los jóvenes para interpretar los comportamientos de otros grupos, el movimiento político de nuestra sociedad. Por lo que durante la noche las diversas formas de vivir son distintas a lo observado durante el día; donde la gente se moviliza cumpliendo sus responsabilidades que tiene dentro la sociedad lucrativa, que es como la lucha del más fuerte que resulta ser la lucha ante la vida del que más “trabaja”.

La noche otorga otra identificación que es sancionado por una moral dominante de los adultos que imaginan y consideran que es un tiempo para drogas, alcohol, delincuencia; por lo que algunos restringen las salidas nocturnas por el miedo a las influencias que podrían tener sus hijos/as, que da lugar a la noche una perspectiva de rebelión de las colectividades juveniles que de alguna manera muestran comportamientos indeseables que están apoyados por los medios de comunicación principalmente el “internet” por el que adquieren modos de vida nocturna influenciado por lo ajeno a nuestra cultura, así también juega un papel importante el celular que es un instrumento de fácil ubicación directa con los jóvenes, para los encuentros nocturnos.

Los jóvenes salen moderadamente a divertirse, compartir, conocer gente, encuentran más jóvenes con alguna característica en común; pero esto también puede derivar en excesos, riñas, peleas, vulnerabilidad hacia los delincuentes, la encarnación a los deseos y necesidades primarios como el sexo, y la fuga de la realidad por medio de sustancias –como drogas, fármacos etc. –por lo que los adultos generalizan el comportamiento de la colectividad juvenil. Ellos remarcan que el consumo del alcohol se da por la invitación a lugares en los que se puede compartir, si el lugar tendría la ocupación de otros grupos de jóvenes existe una distinción de carácter imaginario por lo que prima el “el respeto a lo diferente” que claro no limita a conocer más jóvenes pues la amistad puede ser diversa, y si existen confrontación entre estos grupos se debe a que alguno rompió ese margen imaginario de respeto. De alguna manera se da lugar a marcar zonas, por ejemplo, la Sud esta etiquetada como zona peligrosa porque ocurren actos delincuenciales, vandálicos que abarcan desde la avenida Aroma – Coronilla, La Cancha – zona Terminal, avenida 6 de Agosto, Cerro Verde – Laguna Alalay, Valle Hermoso – avenida Petrolera, villa México, villa Loreto; por la presencia de pandillas, conformado por diferentes tipos de antisociales (carteristas, cogoteros, inhaladores de clefa, etc.)

Zona Oeste, hacia Quillacollo se caracteriza por una variedad de locales en el camino, con un alto índice de accidentes automovilísticos.

Zona Norte, no se da una asistencia frecuente a boliches para los distintos encuentros por la ausencia de las mismas, razón por la que los jóvenes frecuentan lugares como el Prado, la España, la plaza de las Flores, Boulevard de la Recoleta –que se encuentran en la zona céntrica del municipio de Cercado– los encuentros son para compartir entre amigos, para comer, salir al cine, parques, es la población más susceptible para las industrias de comercio, el ocio y el consumo en general. Cuando los jóvenes se reúnen en los espacios públicos no es a manera de invasión, pues incluso se organizan en lugares específicos lugares para su encuentro.

Tuvimos la oportunidad de asistir al Centro Cultural Kamasa ubicado en la avenida Simón López, donde se dio una tocada de Rap, Hip Hop, los jóvenes compartían su manera de expresarse, el respeto a los diferentes grupos de jóvenes, la cultura por la variedad porque en el lugar también se encontraba un grupo de Tarqueada que realizaba la tradicional k`oa, manifestarse del mismo modo hacia la situación socio-políticas de nuestra población, al tomar en cuenta que la juventud es el futuro de nuestro país por lo que entre ellos tratan de plantearse soluciones ante las crisis.

Zona Este como se dijo anteriormente abarca el camino al municipio de Sacaba, y la misma urbanización del municipio, por las entrevistas que logramos

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