Niños Tiranos

42 Frases Para una Crítica de la Noción de “Niños Tiranos”

1. No existe niño aislado de su contexto: las acciones de los niños se comprenden al interior de los contextos relacionales que lo rodean.

2. Es fundamental evitar patologizar o etiquetar al niño con expresiones tales como “niño malo”, “niño tirano”, “niño enfermo”, “niño manipulador”, “niño abusador” y/o “niño ladrón”.

3. La actitud mal llamada “tiránica” no nace con los niños: se construye por la vía de patrones de crianza donde prima el apego inseguro, así como por la dificultad de los padres en el ejercicio de límites amorosos.

4. Como contexto social e histórico, cabe considerar que la expansión de la democracia ha conllevado un cuestionamiento de la autoridad patriarcal y vertical.

5. Asimismo, el auge del capitalismo ha vuelto fácil que la presencia amorosa sea suplida por el materialismo y consumismo exacerbados: los antiguos padres severos y autoritarios han dado lugar a padres que suplen el amor con consumo; a su vez, los antiguos hijos sumisos y obedientes han dado lugar a hijos solos y demandantes.

6. Antes los padres no se atrevían a ser tiernos con sus hijos, por temor a perder autoridad; hoy los padres no se atreven a ser firmes con sus hijos, por temor a ser violentos.

7. Los padres de hoy han pasado al otro lado del péndulo: han permutado la dictadura de la firmeza por la dictadura de la ternura.

8. En el fondo, nada ha cambiado: lo más difícil sigue siendo ser tiernos y firmes al mismo tiempo.

9. Hoy es común encontrarse con padres y madres profundamente desbordados por sus hijos, incapaces de ejercer un rol protector, que incluya límites amorosos al interior de un vínculo cercano y confiable.

10. Hay padres y madres que buscan en sus niños la contención que no obtuvieron de sus propios padres.

11. Los niños no pueden contenerse porque no han sido suficientemente contenidos por sus padres, quienes tampoco fueron contenidos cuando niños, en una línea de transmisión intergeneracional interminable.

12. Detrás de todo hijo disfrazado de tirano, hay un niño que necesita ser visto, escuchado y contenido.

13. Los padres de los mal llamados “hijos tiranos” suelen ser a su vez hijos de “padres tiranos”: se trata de personas traumatizadas de niños por una educación adultocéntrica, patriarcal y autoritaria, que una vez en el rol de padres se desplazan al extremo opuesto, siendo extremadamente complacientes e incapaces de poner límites amorosos, porque límites es para ellos sinónimo de violencia; son padres que terminan obedeciendo a sus hijos como antes obedecían a sus propios padres.

14. En psicoterapia, es posible constatar que los motivos que llevan a una actitud mal llamada “tiránica” en el niño son múltiples: problemáticas no resueltas de los padres, disfunción familiar, padres con patrones de apego inseguro, miedo de los padres a perder el amor de los hijos, acorazamiento del niño o la niña por insuficiente contención parental, triangulación (niños expuestos como intermediarios en conflictos

parentales crónicos), parentalización (niños que ocupan el lugar de uno de los padres ante su ausencia), sobreprotección parental, conflictos parentales latentes, etc.

15. Un denominador común es la dificultad para poner límites amorosos, de manera tierna y firme a la vez, sin caer en la violencia, prepotencia o autoritarismo, pero tampoco en la negligencia despreocupada.

16. Una crianza respetuosa ayuda a prevenir que los hijos desarrollen actitudes “tiránicas”.

17. La crianza respetuosa tiene como base comprender y respetar al niño como persona, en lugar de tratarlo como objeto o ser inferior desde una posición adultocéntrica.

18. Implica asumir que el niño es una criatura dependiente y provista de necesidades afectivas, y no un «pequeño tirano» manipulador a quien habría que doblegar y forzar a una maduración e independencia prematuras.

19. El énfasis de la crianza respetuosa radica en la provisión parental de amor incondicional, seguridad, empatía y respeto hacia los hijos, y en la evitación de la violencia, el rechazo, el castigo, el exitismo y la competencia desmedida.

20. Se trata de brindar un ambiente facilitador para el desarrollo de su espontaneidad, vitalidad, creatividad y singularidad.

21. La crianza respetuosa encuentra respaldo en la neurobiología interpersonal, que muestra que los roles principales de los padres o cuidadores consisten en contener y regular los afectos del bebé (y no esperar a que lo haga solo), modular el estrés del bebé (evitar acrecentar el impacto del estrés en su cerebro), promover

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