Psicologia Institucional
Enviado por ramone1 • 22 de Mayo de 2014 • 1.502 Palabras (7 Páginas) • 185 Visitas
Los fenómenos de poder poseen distintos rasgos característicos según la perspectiva con la que se los aborde. Para la Sociología Clásica, mas precisamente para Michael Crozier, quien ha estudiado el tema del poder en el campo especifico de las organizaciones, en su libro “La sociedad bloqueada”, considera que estos fenómenos deben interpretarse como “fenómenos de relación entre individuos y entre grupos, y en último extremo como procesos que hacen comparecer, con sus objetivos y reglas de juego, la organización o el sistema organizado en que participan los diferentes protagonistas”, y que solo son posibles de medir las fuerzas actuantes y extraer las leyes de su negociación a través de un “análisis estratégico”.
Partiendo de esta definición de las relaciones de poder, el autor señala sus características y sus dificultades al momento de precisarlo. Este afirma que “todos los procesos de integración social van necesariamente acompañados por fenómenos de poder”, sin embargo, los fenómenos de poder solo pueden existir siempre y cuando dos partes se integren, al menos temporalmente, en un conjunto organizado en pos de un objetivo común, es dentro de esta organización en donde se produce la mutua negociación que les da origen.
Para Crozier, el poder implica una confrontación entre dos partes, y esta puede tratarse tanto una relación intencional y consciente, como de una influencia involuntaria que puede ser ejercida sin que lo sepan una de las dos partes o ambas a la vez, y advierte que si bien ambos casos remiten al poder no lo hacen de igual manera. Además, señala que estas relaciones de poder son también especificas y reciprocas, es decir, que las relaciones de poder no poseen un patrón de medida, cada individuo en su ejercicio del poder obtiene una acción distinta de su contraparte, y que el hecho de que un individuo pueda lograr que otro haga algo que no habría hecho sin su intervención, supone también que ese otro sujeto actué de la misma manera sobre el primero.
Hacia el interior de una organización, toda relación entre dos partes supone cambio y adaptación, estos procesos remiten directamente a las relaciones de poder que se desarrollan en el campo de la negociación, sin embargo, solo podemos afirmar que estas relaciones existen siempre que en la negociación, los términos de intercambio son falseados a favor de una parte o de la otra, es decir, siempre que exista desigualdad. Sin embargo, también es fundamental que quien posee el poder tenga la capacidad y la voluntad de ejercerlo.
La confrontación entre las dos partes consiste en un intercambio de posibilidades de acción, es decir, que la clave de sus comportamientos está dada por el margen de libertad y de arbitrariedad respecto de las negociaciones por el poder. En este sentido podemos afirmar, que el sujeto que sea capaz de utilizar su libertad de comportamiento para afectar la situación de su oponente, será menos vulnerable a este y en consecuencia más poder tendrá sobre él. La relación de fuerzas es entonces, la confrontación de la capacidad de cada una de las partes para volver menos previsible su comportamiento futuro.
Poder supone Organización, y esto es así porque los hombres solo pueden alcanzar sus objetivos comunes a través de esta que a su vez supone relaciones de poder. Hacia el interior de estas negociaciones se establecen los” términos del intercambio”, estos son el resultado de un juego cuyas restricciones constituye ocasiones de manipulación para sus protagonistas y en definitiva tienden a determinar una estrategia. El autor reconoce que existe un factor externo que interviene en la confrontación por el poder, este se refiere a “las reglas del juego” como la normativa institucional que tiende a determinar las fuentes artificiales de incertidumbre y que permiten a quienes las controlan negociar con aquellos cuya situación estratégica favorable los colocaría de lo contrario, en situación de superioridad. A través de estas restricciones, que representan los objetivos formales fijados por la organización y aceptados por los participantes y las reglas de juego que les son impuestas o que ellos imponen y operan de manera indirecta, los integrantes de una organización desarrollan sus estrategias y las ponen en práctica en las negociaciones de poder, ya sea entre ellos mismos y la organización o en la negociación con otro participante.
Crozier señala también el carácter contradictorio de las relaciones de poder, que aparecen por un lado como algo vergonzoso, y por otro, como algo honrado y de expresión legitima, necesaria para sostener el control social que permite el éxito del esfuerzo
...