Psicología Social

PSICOLOGÍA SOCIAL

La estructura de dominación de los siglos XVII y XVIII en Europa fue lo que llevó a que surgiera el llamado “mundo moderno”.

Este período se caracterizó por la concentración del poder en ciertos reinos, logrando así el desplazamiento del poder de la estructura de dominación de las comunidades feudales a las sociedades nacionales, es decir, que los feudos de asentamiento rural comenzaron a perder vigencia en la estructura del poder y las cortes de asentamiento urbano comenzaron a tener más poder, creándose una encarnizada competencia por ganar el poder.

Todo esto trajo aparejado muchas cosas como la migración, el crecimiento de las ciudades capitales, nuevas formas de representación, etc, poniendo énfasis en la razón , pasando ésta a sustituir la fe religiosa en lo que se refiere al origen del mundo , intentándose también una comprensión científica del mismo.

El proyecto de la modernidad apostaba al progreso. Se creía que la ciencia avanzaba hacia la verdad, el arte se expandía como forma de vida y la ética encontraría la universalidad de normas fundamentadas racionalmente. La modernidad implicaba la emancipación de la humanidad ya que a través del progreso de las ciencias, de las artes y las libertades políticas se liberará a toda la humanidad de la ignorancia, de la incultura, etc, produciendo así hombres felices y ciudadanos ilustrados.

La modernidad acuñaba toda una constelación de palabras que giraban alrededor del término “futuro”.

En el marco de todo esto es que surgen las ciencias sociales y la psicología social. Muchas veces cuando se intenta definir que estudia la psicología social buscamos describir que parcela de la realidad estudia. La psicóloga social que se desprende de las ciencias sociales, tiene como objeto la interacción social, por lo tanto resulta un poco difícil su delimitación disciplinar y no la entendemos en términos geopolíticos delimitando como objeto de estudio una parcela o territorio de la realidad sino que la entendemos como una cuestión abierta y en términos epistemológicos. Una ciencia se define y legitima no por la existencia de una parcela de la realidad como objeto de estudio sino por un tipo de relación , en el caso de la psicóloga social , como dijimos anteriormente, un modo de relación: “la interacción social”.

La legitimación de esta disciplina es un proceso retórico, que tiene que ver con la autoridad que se tiene para decir algo, también con la posibilidad de que esto sea aceptado, ambas cosas el decir y el hacer deben poseer una racionalidad en si.

Cabe destacar que la racionalidad requiere que existan por un lado argumentos que sean aceptados en un determinado contexto social, por otro la aceptación de hipótesis universales, es decir, que la psicología social es legítima por que es racional.

Ahora bien, el término de psicología social ha tenido diferentes acepciones a lo largo de su desarrollo. El concepto en si a dado lugar a que se presentaran ciertas contradicciones y a que se utilice una lectura binaria de la psicología social.

Por un lado psicología se refiere al interior del individuo, es decir a la psique del mismo independiente de lo social; la idea de social sugiere a las instituciones y estructuras de organización de los seres humanos, aquí el sujeto ya no se considera como individuo sino como una colectividad. Estas contradicciones han llevado a lo que denomina la “antinomia individuo-sociedad”. Por un lado se considera al individuo como realidad en si mismo, esto quiere decir que sólo él piensa, percibe, ama , etc. Desde aquí el grupo, la sociedad, sería únicamente generalizaciones teóricas, los individuos son las única unidades accesibles de observación (tesis individualista).

En la tesis opuesta (tesis colectivista) solamente el grupo, la sociedad son reales y el individuo sería un producto de este; el individuo (para esta tesis) fuera del grupo no existe, no tiene ningún carácter

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