Psicoterapia Grupo-analítica

Psicoterapia grupo-analítica

Foulkes, S. H.

La psicoterapia grupo-analítica se trata de una forma de psicoterapia por el grupo y del grupo, incluyendo a su conductor, el cual dirige el grupo, razón por la cual es llamado conductor, guardián y guía del grupo analítico. La situación total es el marco de referencia para todas las operaciones y para la interpretación de todos los acontecimientos observables. La situación en este contexto, comprende todas las circunstancias de la realidad objetiva.

Existen diferentes tipos de grupo en operación: el grupo operativo o grupo vida, esto es el grupo en el cual surgen los conflictos; y el grupo de individuos inconexos, formado por extraños que buscan fines especiales. La red íntima y dinámica es llamada complexus o más brevemente plexus, lo que quiere decir que un número relativamente pequeño de personas se agrupa dinámicamente alrededor de la persona central, especialmente en conexión con sus conflictos.

En el grupo vida, lo importante del método es observar que no construimos o anticipamos un complexus de personas, sino que construimos a partir del paciente central y seguimos la psicodinámica a medida que se toma conciencia de ellos como un grupo de gente alrededor de él, que resulta tener conexiones con su conflicto básico, sus síntomas y sus problemas. Cada uno de los participantes es reconocido como un punto nodal y cada uno estuvo rodeado de un plexus para formar parte de otro complexus. Sin embargo puede ocurrir que el problema central no se localice en el paciente referido.

Las personas están íntimamente relacionadas que trabajan intensamente a partir de los estímulos que reciben y porque la sesión actúa como catalizador de los cambios que se producen.

La psicoterapia familiar puede ser mejor estudiada en una etapa posterior, cuando los hijos son más o menos adolecentes e inclusive adultos. Entonces se puede obtener un cuadro claro del modo en que se han ido moldeando por las condiciones predominantes en la familia en que nacieron y de la que forman parte.

En los grupos inconexos, la formación de grupos con fines específicos de tratamiento se reúnen pacientes que en la vida no tienen contacto alguno; además no deben desarrollar contacto alguno durante el tratamiento ni después del mismo. Estos grupos operan fuera de la situación vital, con personas extrañas entre sí, que comparten únicamente la situación terapéutica.

“La experiencia ha mostrado que hace falta alrededor de 12 candidatos idóneos a fin de formar un grupo de 8”. Es importante crear el clima adecuado, hacer que desde el primer momento se entienda que todos están invitados a hablar, comentar o reaccionar a los que se dicen, aun cuando no sea su turno.

Ante esta situación no se debe subestimar el peligro de exponer a la gente a tales encuentros cuando estén demasiado enfermos, pues la experiencia puede desencadenar su trastorno mental. Es importante observar al individuo y sus trastornos tal como si fuese en un contexto de plexus íntimo. Debemos tratar al individuo fuera de su plexus, es decir, de manera individual; esto es posible en una situación individual o en un grupo analítico. En ambas situaciones se le tratara como individuo con la única diferencia de que en el grupo se unirá para la solución y tratamiento de sus problemas; por lo tanto enfrenta sus problemas con los demás, en un contexto totalmente nuevo y en una situación nueva, muy distinta a cualquier otra que haya experimentado.

Una de las ventajas de la psicoterapia individual es la posibilidad de observar un enfoque personal de los problemas, su capacidad de respuesta, de insight y su motivación y recursos de personalidad. (La modalidad analítica de tratamiento no es conveniente cuando la perturbación es muy aguda o el tratamiento es muy urgente).

En caso de que el análisis individual resulte absolutamente necesario, el grupo análisis previo ahorra mucho tiempo y lo abrevia notablemente. Desde un punto de vista teórico y práctico puede decirse que el grupo análisis es el lugar adecuado para estudiar los procesos terapéuticos.

Las principales formas de grupos grupo-analíticos son:

• Grupo cerrado, que debe comenzar y terminar al mismo tiempo para todos sus miembros. Todos deben estar preparados para permanecer en el desarrollo del tratamiento sin importar su duración.

• Grupo combinado, que mezcla la psicoterapia individual y grupal. Se reúnen una vez por semana y cada individuo se reúne con el terapeuta en sesión individual, con la misma frecuencia para cada uno de los miembros. El inconveniente es la relación que se puede establecer con el terapeuta.

• Grupo abierto-lento, en donde los problemas especiales que surgen se refieren a la introducción de nuevos pacientes y la preparación del grupo paras este acontecimiento, es decir, la elección adecuada del paciente en el momento preciso y la finalización del tratamiento. Tanto abandonar el grupo como unirse a él requiere la consideración individual y grupal. Este grupo puede ser benéfico para el paciente ya que lleva una estructura vivencial parecida a la

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