SOLUCION DE CONFLICTOS LBORALES

Si mis relaciones en el ámbito laboral no son las mejores, ya que en mi sección debo lidiar con compañeros groseros que nada saben de buenos modales, debo poner en práctica una serie de consejos para solucionar las asperezas ya que, tarde o temprano, un mal vínculo en el trabajo podrá perjudicar mi carrera, según consigna el portal HowtoDoThings.com

 No perder la calma. Siempre que un compañero de trabajo intente provocarme o distraerme, déjalo ir y continúa con mis tareas. Perder la calma no resolverá nada y eso es exactamente lo que él quiere que hagas. Si te mantienes calmado, no habrá nada de que arrepentirte.

 La ignorancia es felicidad. Si mi compañero de trabajo persiste, tengo que ser capaz de hacer caso omiso de sus constantes intentos por ponerte nervioso. A veces, si se ignora el problema, simplemente se va. Cuando quiera burlarse de ti, dile que estás ocupado y no tienes tiempo para distracciones.

 Resistencia a las represalias. No me rebajo a su nivel ni pretendo vengarme por lo que me ha hecho. Si juego con fuego, puedo llegar a perder todo lo que he construido en la empresa con sacrificio. Encuentra otra forma de desahogar su frustración. Lo importante aquí es que usted sigue siendo tan cortés como siempre.

 La confrontación pacífica. Si persiste la molestia y la situación empeora, puedo abordar el problema de frente. En estos casos debo ser lo más respetuoso posible y preguntarle si tiene algún problema con usted o si le he hecho daño. Por lo general, las personas civilizadas pueden hablar y manejar sus diferencias sin recurrir a la violencia.

 Pregunte en la oficina. Es bueno preguntar a compañeros de confianza sobre quien te está molestando; tal vez de esa manera puedes conocer más sobre su comportamiento grosero. Si esa persona ha tenido algún problema con él en el pasado pídele consejos para saber cómo lo resolvieron.

 Llévelo a su jefe. Una vez que el problema comienza a interferir con su trabajo y que haya agotado todos los medios pacíficos para resolver la situación, entonces puedo recurrir a mi jefe. Utilizo esta opción sólo como un último recurso, porque nunca se quiere implicar a la administración con "disputas mezquinas de la oficina".

 Si es mi jefe el grosero. En este caso, me encuentro frente a un problema importante y sólo tendré que vivir con ello si realmente te gusta lo que haces. Busca apoyo de otra gente y procura seguir siendo educado y respetuoso, sin importar lo que pase.

Tratar con compañeros groseros requiere de habilidad y una actitud correcta. Lo que antes era una distracción podría convertirse en una guerra total actúo de manera equivocada.

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