Segundo Parcial de Psicoanálisis I Construcción de la primera tópica

Segundo Parcial de Psicoanálisis I
Construcción de la primera tópica

1895: La historia de la constitución del Aparato Psíquico.         
Freud estuvo trabajando en “Proyecto de Psicología para neurólogos”, la base era el cerebro, las neuronas.         
Las neuronas son la estructura del aparato Psíquico y la excitación o cantidad va a dar cuenta de la dinámica que hay en las neuronas.         
Freud dice que la memoria está en la sinapsis de las neuronas.        
Uno de los objetivos básicos del aparato psíquico es defenderse de cantidades.
En el Proyecto se manifiesta como principio de inercia a la tendencia a llevar las cantidades que llegan al aparato anímico a cero. Por supuesto el cero absoluto es la muerte.        
El principio de inercia es perturbado por el principio de constancia: se descarga la mayoría de lo que molesta pero queda un poco de energía para el requerimiento de la vida. Cierta tensión tenemos que tener para vivir, si tenemos baja tensión no podemos vivir bien.         
Homeostasis: Equilibrio. Tranquilidad.                
Si recibimos todo lo que aparece del exterior nuestro yo estallaría, por eso debe haber ciertas barreras protectoras contra los estímulos sobre todo externos.
Un primer sistema de defensa está dado por las pantallas teleneuronales; son las defensas contra los estímulos que están en los mismos órganos de los sentidos. Son biológicas. Por ejemplo: Si alguien toca el fuego y se quema saca inmediatamente la mano, por la defensa del propio organismo.
Si hay una luz fuerte, cierro los ojos.         
Una segunda forma de defensa es el movimiento reflejo de descarga, son las vías medulares las encargadas de esta acción.        
Por otro lado, otra forma de defensa es la transformación de la cantidad en organización. Al organizarse baja la cantidad en el aparato psíquico.
Existen tres clases de neuronas: las Phi (ϕ) que son permeables, no detienen la información, la pasan a otros neuronas (a través de la sinapsis), luego están las neuronas Psi (ψ) las cuales no son permeables, van a detener y mantener lo que proviene del exterior. Va a ser la memoria biológica.
Las sinapsis son las que contienen la memoria, no la neurona en sí.        
Luego hay otro tipo de neuronas, las neuronas perceptivas o ω (omega) y cuyos estados de excitación darían lugar a las distintas cualidades. En la medida en que recibimos los datos del interior y exterior estas neuronas reciben las cualidades, las sensaciones, lo afectivo. Nosotros podemos recordar lo que sucedió pero en este recuerdo no tenemos la sensación.        

Otro de los esfuerzos por describir los fenómenos psíquicos desde el aparato cerebral es la Carta 52:

Esta carta es enviada a Fliess. La base de esta es también la concepción neuronal pero de un aparato psíquico evolutivo, donde las neuronas reciben los elementos del exterior a través de la percepción. Luego hay otro grupo de neuronas que son los signos de percepción que unen por simultaneidad dos elementos. Dos elementos que se dan en el mismo momento se van a asociar. Ej: el bebé asocia boca con pezón. Este es el primer momento que tiene el niño de juntar vivencias, son marcas. Esto nunca se hace consciente, aparecen en la acción.        
Los signos de percepción no se vuelven conscientes, pero no se pierden.
Lo elementos inconscientes se van a asociar por causa-efecto.
Freud habla de que los elementos se van RETRANSCRIBIENDO de un período a otro. Los elementos con el paso del tiempo se van transformando y aquellos que no pudieron retranscribirse quedan en lo inconsciente, quedan inmaduros.
El pre consciente tiene los restos de las situaciones vividas pero hay un yo de la defensa que organiza nuestros intereses.        
Fin de la carta 52.        

Freud sale de la carta 52 a otro modo de pensar. Él estaba estudiando los sueños, lapsus, etc.        Desde ese punto de vista neuronal no podían entenderlos.
Deja lo neuronal y comienza a hablar en el aparato psíquico de la representación. Acá se da una ruptura epistemológica. Los paradigmas pasan a ser distintos.        Esto lo desarrolla de la interpretación de los sueños.        

El primer esquema es uno que se diferencia de los otros porque es cerrado, posee paredes.        
Freud nos dice que lo que recibimos como percepción deja marcas en el aparato psíquico (huellas mnémicas).        
Este aparato psíquico, para hacer la descarga, va a ir desde la percepción a la motilidad.
Algunas cosas de la percepción se pueden unir por asociaciones, causa-efecto, etc.
En un momento ocurre una represión (se reprime la sexualidad infantil) y queda dividido lo inconsciente de los pre consciente. El organizador del pre consciente es el yo, lo organiza según sus intereses.        
Se juntan las dos puntas. Percepción, inconsciente y yo están de cierto modo unidos. El yo se constituye a través de la percepción.         
Con la percepción se llega a lo pre consciente y el yo, que tiene el principio de realidad, decide si se mantiene consciente o pasa a ser inconsciente. Este yo puede determinar que situaciones se hacen conscientes o no y decide además cuales pueden ir a la acción.         
El inconsciente siempre está intentando su desagote (Principio de placer, vivencia de satisfacción).        
Cuando el niño tiene la vivencia de satisfacción queda una imagen de lo anterior. Ej: el bebé tiene hambre y su madre le da la teta.        
Cuando su madre no viene a darle la teta el niño alucina y chupa el chupete.
Llora y si su madre tampoco aparece se da la vivencia de dolor (frustración).
El sentido de realidad empieza a organizar la parte del pre consciente y el yo. (Ej de sentido de realidad: el niño cuando quiere tomar la leche y su madre no viene espera a que aparezca ese objeto de deseo (su madre), empieza a oler y tocar a su madre para ver si de verdad lo va a satisfacer).         
Siempre el pre consciente va en la búsqueda del no dolor.

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