TEORÍA DE LA GESTALT

TEORÍA DE LA GESTALT

Defiende la naturaleza holística del proceso perceptivo, resumido en la frase: “el todo el mayor que la suma de las partes”. “Percibimos totalidades y no elementos aislados”.

La forma es un esquema de relaciones invariantes entre ciertos elementos y relativamente independiente de las características físicas en las que se encuentra materializada.

La Teoría de la forma nace en Alemania a principios del siglo XX, como reacción a la psicología analítica. Los tres psicólogos que más se asocian con la teoría de la Gestalt son: Max Wertheimer, Kurt Koffka y Wolfang Köhler.

Distintos principios afirman la importancia de la totalidad, gestalt o forma:

- Los hechos objetivos y subjetivos son siempre totalidades: el medio físico nos presenta objetos totales.

- Percibimos en forma de figura sobre un fondo: en todo hecho perceptivo hay un elemento que se destaca como figura, y todo lo que ocupa el resto del campo perceptivo aparece como fondo.

- Las partes y los todos no son absolutos: un todo puede ser parte de otro todo mayor.

- Las partes tienen un significado según la naturaleza del todo que integran.

- Isomorfismo: a toda forma o todo psicológico corresponde una forma o todo fisiológico. Hay correspondencia e identidad entre la forma o estructura psíquica y la fisiológica.

Wertheimer, Koffka y Köhler investigaron tres áreas: las leyes de agrupación, la bondad de las figuras (Ley de Prägnanz) y las relaciones entre figura y fondo.

Relación figura–fondo: Las partes de un diseño se organizan en base a una figura y sobre un fondo. Cuando dos áreas comparten un límite común, la figura es la forma diferente con bordes muy definidos. El fondo es lo que sobra, lo que está por detrás.

Edgar Rubin (1915 – 1958), psicólogo danés, fue uno de los primeros en intentar poner en claro lo que constituye la figura, se opone al fondo.

Leyes de Agrupación: Dentro de la perspectiva gestáltica, estas leyes constituyen un intento por identificar las claves más importantes de la visión de objetos en conjuntos:

Ley de la similitud: determina que los objetos similares tienden a ser percibidos como un todo. También se la llama Ley de identidad o Ley de semejanza.

Ley de la proximidad: dice que percibimos como un todo los objetos contiguos, o más próximos.

Ley de la buena curva o del destino común: percibimos como totalidades los objetos que forman una serie continua y regular, que tienen la misma orientación.

Ley del movimiento común: percibimos como un todo dos o más objetos que se mueven en la misma dirección, y configuramos totalidades diferentes con dos o más objetos que se mueven en direcciones distintas, y con los objetos que permanecen estáticos en relación con los que se mueven.

Ley del cierre: dice que nuestra percepción tiende a cerrar las figuras incompletas, o sea que cuando una figura tiene una abertura, tendemos a verla como completa y cerrada.

Ley de la totalidad: percibimos más fácilmente las superficies cerradas, las formas terminadas.

Ley

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