Teoría General y Clínica de la Neurosis
Enviado por GENNESIS BRIGETTE ORDOÑEZ RAMOS • 26 de Enero de 2021 • Ensayo • 2.194 Palabras (9 Páginas) • 96 Visitas
“UNIVERSIDAD DE CUENCA”
[pic 1]
Nombre:
Génesis Ordoñez
Asignatura:
Teoría General y Clínica de la Neurosis
Tema:
Ensayo Critico del Psicoanálisis y método psicoanalítico
Carrera:
6to Psicología Clínica
Periodo:
Marzo - septiembre
ENSAYO SOBRE EL PSICOANALISIS
A lo largo del tiempo, la conducta y el comportamiento humano siempre ha sido un tema de debate e inclusive de conflicto. Varias corrientes psicológicas, desde sus diferentes perspectivas, han ido aportando con ideas del porqué del comportamiento humano. El psicoanálisis ha sido sujeto de innumerables críticas a lo largo de su historia buena parte de ellas son dirigidas a la aplicación del método científico y con su eficiencia terapéutica. El psicoanálisis, como disciplina independiente y como método de investigación surge en un ambiente positivista, en el cual el mayor exponente fue Sigmund Freud, quien inicia sus trabajos en relación a la histeria y la hipnosis. Como modelo teórico, el psicoanálisis estudia la conducta y el comportamiento del hombre a partir de los hechos reprimidos en el inconsciente y por lo general estos hechos tienden a manifestarse durante el desarrollo psicosexual.
El psicoanálisis comienza con los estudios de Freud sobre aquellos elementos de los que no éramos conscientes y el estudio de los pacientes que manifestaban problemas físicos que no tenían ninguna explicación. También se interesó en elementos como las pesadillas, las palabras que salían sin sentido al hablar, las parálisis y entumecimientos musculares inexplicables, entre otros actos realizados de manera inconsciente. Estos temas no eran tomados en cuenta dentro de la psiquiatría y psicología de su época, lo cual lo motivó para que realizara sus estudios de la neurosis, añadiéndolo como parte importante que se debería tomar en cuenta en el presente trabajo ya que engloba la razones por la cual Freud baso sus ideas. Con el fin de aliviar a las personas en sus afecciones utilizo varios medios que comprendían desde la cura de aguas hasta la hipnosis, para llegar a un método de confiable eficacia llamado asociación libre, en el cual el paciente relata todo lo que se le ocurre y mediante la interpretación lógica articular todos los fenómenos anteriores.
A lo largo del desarrollo del psicoanálisis, va teniendo una evolución muy interesante ya que nos muestra como Freud fue incorporando nuevos términos que describieron la mente humana. Teniendo en cuenta que el psicoanálisis concibe al ser humano como un organismo sujeto a los propósitos de su filogenia y cultura a través del inconsciente que actúa bajo la motivación en términos de la energía, incorporó la teoría de las estructuras de la mente y las estructuras de la personalidad. En cuanto a las estructuras de la mente, lo que en un principio se distinguía como la mente consciente y la inconsciente, pasó a definirlo como: el ello, ubicado en el inconsciente y quién realiza la descarga inmediata de energía, el yo, ubicado en el consiente y quien regula las interacciones de la persona con el medio ambiente, la rama ejecutiva de la personalidad y finalmente el superyó, que representa los aspectos morales y críticos de la personalidad. Estas dimensiones de la personalidad dependen de la energía instintiva que Freud denomina como libido. Cuando el superyó y el ello entra en conflicto actúan los mecanismos de defensa como ayuda para adaptarse al medio ambiente, entre ellos están la represión, supresión, negación, fijación, entre otros. (Duarte, 2012.)
Las estructuras de la mente se relacionan con las de la personalidad, ya que en cada una de las etapas que Freud describe se hacen presenten las dinámicas mencionadas anteriormente y en qué parte del cuerpo se manifiesta la energía instintiva. En la psicología freudiana, el desarrollo psicosexual es un elemento central de la teoría psicoanalítica de las pulsiones sexuales que sostiene que el ser humano, desde el nacimiento, posee una libido instintiva (energía sexual) que se desarrolla en cinco etapas. En esta teoría, desarrollada hacia finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, Freud propone un concepto ampliado de la sexualidad humana, idea revolucionaria en su época, que postula la existencia de una sexualidad infantil, cuyo desarrollo está organizado en fases. Freud postuló que la maduración progresiva de las funciones corporales se centraba en las zonas erógenas (boca, ano, genitales) y se avanzaba esta maduración junto con los placeres y temores experimentados en relación con sus cuidadores, tomados estos como relación de objeto. (Ríos, s.f.) Entre ellas es importante hacer énfasis en la etapa fálica que se da entre los cuatro y seis años y es en esta donde la figura del padre que viene siendo el superyó se hace presente, debido a esto juega un papel importante en la resolución de complejo de Edipo, que consiste en la dirección del deseo erótico hacia el objetivo primario de deseo, la madre. Según Freud: “[C]uando el niño comienza a sentir impulsos sexuales en relación a su madre, dice Freud, se despiertan en él celos de su rival, el padre” (Miller, 1983, p.331 como se citó en Duarte, 2012). El complejo de Edipo es el núcleo de toda neurosis. El niño a los 6 años se vuelve consciente de la naturaleza sexual de la relación entre sus padres, de la cual él está excluido. Aparecen fuertes sentimientos de celos y rivalidad que deberán ser resueltos, junto con otros problemas como quien es hombre, quien mujer, a quien se puede amar, con quien se puede casar, como vienen lo bebes al mundo.
Añado mencionar que Sigmund Freud le dio mucha importancia a la sexualidad del individuo como origen de la perturbación neurótica. Esta vivencia sexual prematura traumática posteriormente es reprimida. Su represión, a raíz de una segunda vivencia traumática despierta su recuerdo y lleva a la formación de un síntoma primario, luego el individuo genera un mecanismo de defensa y finalmente las representaciones reprimidas retornan y en la lucha de estas con el yo se generan síntomas nuevos, es decir la neurosis propiamente dicha en la que el yo se haya sometido. Freud, quien señala que la neurosis engloba toda “afección psicógena cuyos síntomas son la expresión simbólica de un conflicto psíquico que tiene sus raíces en la historia infantil del sujeto y constituyen compromisos entre el deseo y la defensa” (Laplanche & Pontalis, 1969, p. 236). Como característica común de las neurosis, se entendía que probablemente surgían por factores psíquicos, especialmente por miedos y dificultades sexuales reprimidas. Los trastornos en el desarrollo infantil se contemplan, desde este punto de vista, como un complejo en el inconsciente y como consecuencia, presentan diferentes reacciones neuróticas, dependiendo del tipo de trastorno y de su tratamiento. De igual forma, desarrolló trabajos que se basaban en la histeria y trastornos nerviosos. A partir de estos trabajos se elaboró una clasificación que distinguía varios tipos de neurosis: neurosis de angustia, fóbicas, obsesivo-compulsivas, depresivas, neurasténicas, de despersonalización, hipocondríacas e histéricas.
...