Un Milagro Para Helen

No hay amistad más sagrada que la que se entabla entre el alumno y el maestro

La enfermedad de Hellen Keller se produjo por una fiebre a los 19 meses de edad que tuvo en ella una grave repercusión que la dejo ciega y sorda a muy temprana edad por este motivo ella tuvo que vivir en completa oscuridad y silencio solo con el sentido del olfato, tacto y gusto. Los sentidos juegan un papel importante los cuales se tuvieron que explotar al máximo para desarrollar una forma de comunicación eficaz.

Si bien es cierto, Hellen no podía tener una comunicación estrecha y cercana con su familia y personas en general sentía una gran frustración y rabia por no poder tener una forma de comunicación, a sus aproximadamente 6 años era una niña berrinchuda y muy agresiva. Si bien es cierto, aunque tuviera estas incapacidades eso no significaba que ella pueda comportase de forma agresiva, sin modales y sin respeto a los miembros de la familia. Por consiguiente, su entorno familiar se encontraba de una forma tensa y con problemas familiares en su mayor tiempo debido a que ella demandaba mayormente la atención de sus padres.

Su maestra privada Annie Sullivan ella fue un tiempo ciega y aprendió el lenguaje de señas el cual es el que le enseña a Hellen atreves del tacto enseñándole palabras escribiéndolas y haciendo señas en su manos para que por medio de la imitación Hellen pudiera identificar el significado. Asociando primero a que ella aprendería por la imitación de movimientos de las letras luego su cerebro podrá asociarlo a un significado. Annie toma una postura firme y audaz con creatividad y un pensamiento positivo ante su reto a vencer el poder dominar y ganarse la confianza de Hellen.

Asimismo, lo que la maestra hacía para que Hellen pudiera hablar era poner la mano de la niña sobre su boca para que sintiera las vibraciones creadas al hablar, Ane permitía que Hellen tocara las cosas para así poder deletrear el nombre del objeto en la mano de ella y fue así como aprendió el significado de las cosas. El gesto más humano que Hellen hace es el del beso de agradecimiento o de amor que da al final a su maestra; porque conoce y es capaz de hablar gracias a la ayuda de su maestra.

En conclusión, debemos saber que no hay poder más fuerte que la perseverancia y la voluntad de una persona para sobresalir, a pesar de los esquemas que rige una sociedad en la que las personas no deben ser juzgadas por sus condiciones, si no por sus ganas de sobresalir y superar cualquier obstáculo que rige una sociedad.

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