Lectura: Constitución Dei Verbum
Enviado por Jordi Santamaria Parramon • 29 de Enero de 2021 • Trabajo • 551 Palabras (3 Páginas) • 330 Visitas
Asignatura | Datos del alumno | Fecha |
El mensaje cristiano | Apellidos: López Gómez | 06/04/2020 |
Nombre: Isabel |
Actividades[pic 1]
Lectura: Constitución Dei Verbum
Para la realización de este trabajo vamos a leer detenidamente el capítulo III de “La Constitución Dei Verdum” y el Catecismo Católico de la Iglesia, complementando ambos archivos con los apuntes vistos en clase.
Nos adentramos en la explicación del Capítulo III de “LA INSPIRACIÓN DIVINA DE LA SAGRADA ESCRITURA Y SU INTERPRETACIÓN”, encontrado en “La Constitución Dei Verbum”, analizándolo desde fuera hacia dentro:
Nombramos los tres puntos principales en los que se divide dicho capítulo:
- El hecho de la inspiración y de la verdad de la Sagrada Escritura
- Cómo hay que interpretar la Sagrada Escritura
- Condescendencia de Dios
¿Qué es la Sagrada Escritura?
Es un conjunto de libros inspirados por el Espíritu Santo. La Iglesia reconoce por santos y canónicos el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento, compuestos por libros, siendo Dios el autor de los mismos.
Dios es el autor de estas escrituras, pero para la redacción de los Libros Sagrados, eligió a unos hombres o hagiógrafos (se denomina así al autor de los libros de la Sagrada Escritura) de tal manera que obrando sobre ellos escribieron, sin error y a través de un lenguaje humano, lo que Dios quería que supiéramos sobre nuestra salvación.
Si queremos entender de manera correcta la Sagrada Escritura, debemos interpretar aquello que los hagiógrafos quisieron expresar. Hay que tener presente:
- Los géneros literarios (profético, poético, histórico…etc.)
- El contexto y las circunstancias según los hagiógrafos atendiendo al tiempo, la cultura y la forma de pensar de esa época.
Será importante leer e interpretar la Sagrada Escritura con el mismo Espíritu con la que se escribió, atendiendo a tres criterios que expuso el Concilio Vaticano II, tal y como nos explica en el CIC (p.128); atendiendo al contenido y a la unidad de la misma, sin centrarnos en un solo libro. Además, debemos atendiendo a la tradición viva de la Iglesia: La Iglesia encierra en su tradición la memoria viva de la palabra de Dios y el Espíritu Santo; y, por último, atendiendo a la analogía de la fe: cohesión de las verdades de la fe entre sí.
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