DESIDE CON LA CABEZA NO CON EL CORAZON
Enviado por Danet • 23 de Agosto de 2013 • 1.846 Palabras (8 Páginas) • 428 Visitas
Hay muchos jóvenes solteros que basan sus decisiones en lo que les dice “el corazón”, haciendo referencia al hecho de dejarse llevar por lo que los sentimientos lo impulsan a hacer, pero considero que ese termino de: “decide con el corazón”, puede hasta cierto punto llevarnos a cometer grandes errores y muy dolorosos.
Considero que hay momentos en donde no tienes que decidir con el corazón, sino con tu cabeza, es decir, pensar muy bien en lo que estás a punto de decidir, pensar en las consecuencias de eso o en los resultados que quieres ver; y es que muchas veces simplemente sabemos que tenemos que hacer lo contrario a lo que el corazón(sentimientos) nos está impulsando a hacer.
Hoy quiero dedicar este artículo a todos aquellos solteros y solteras que en momento determinado han tenido la valentía de decidir con la cabeza y no con el corazón.
Cuidado con lo que “el corazón” te dicta hacer.
Durante muchos años he sido testigo de muchos casos en los cuales en relaciones de noviazgo uno de los dos ha decido con el corazón y se ha llevado grandes decepciones. Yo mismo en algún momento de mi vida decidí con mi corazón, es decir en base a mis sentimientos y me tope con buenos golpes que me hicieron entender que hay momento en donde no debo decidir con el corazón sino con la cabeza.
El termino decidir con el corazón, se refiere a que decidas en base a tus sentimientos, pero la realidad es que nuestro sentimientos son muy inestables siempre, hoy estoy feliz y mañana quizá este triste, hoy mi estado de animo es muy bueno y pueda que la próxima semana sea muy malo, hoy siento que esa persona es la mujer de mi vida y tal vez el próximo mes sienta que no lo es y es que no podemos vivir pensando que lo que sentimos es realmente lo que queremos.
¿Cuántas veces sentiste que amabas a alguien y que querías casarte con esa persona?, Ahora, muchos meses o años después de haber terminado esa relación, ¿Es realmente lo que querías?, quizá en muchos casos hoy nos damos cuenta que lo que en ese momento sentimos ahora ya no lo sentimos ni mucho menos lo hubiésemos querido concretar. Y es que nuestros sentimientos son engañosos y por esa razón no debemos decidir en base a lo que sentimos. La Biblia dice: “El corazón humano es lo más engañoso que hay, y extremadamente perverso. ¿Quién realmente sabe qué tan malo es?” Jeremías 17:9 (Nueva Traducción Viviente). No todo lo que sientes de parte de tu corazón(sentimientos) es lo que realmente quieres hacer o sentir.
El amor es complicado cuando nos dejamos llevar solamente por los sentimientos y no por la razón, cuando la emoción le gana a la razón nos podemos llevar una gran decepción.
Relaciones dañinas
Hay relaciones amorosas que lejos de ser de bendición se vuelven dañinas y todo porque simplemente nos “dejamos llevar por lo que nuestro corazón siente” y no por lo que nuestra cabeza sabe que tiene que hacer.
Hay parejas de novios que se la pasan peleando todo el tiempo, no hay una sola semana sin que no exista una pelea, una discusión o alguna palabra que de una u otra forma daña a uno de los dos, se dejan por un tiempo y luego vuelven para volver a repetir el mismo circulo de pelas, enojos, reconciliaciones, etc, sin darse cuenta que cada pelea lo único que hace es desgastar la relación. Llega un momento en donde esa relación ya no se puede llamar un noviazgo, porque ningún de los dos disfruta de la compañía del otro, dicen amarse, dicen quererse, pero sus acciones, palabras, actitudes y demás dicen totalmente lo contrario. En ese caso en los cuales ya no hay remedio, en donde por más que lo intenten siempre llegan a lo mismo lo más recomendable es terminar esa relación porque de todas formas tarde o temprano terminaran más dañados de lo que pueden terminar al darse cuenta que esa relación ya no puede seguir.
Quizá alguno diga: “En lugar de animar a que se arreglen las cosas en esas relaciones usted está recomendando que terminen”, ahora te voy a decir porque te recomiendo eso: Durante muchos años he sido testigo de los mismos casos repetidos en cientos de parejas de noviazgo, pareciera que todo se repite igual, pareciera una copia de cada caso, parejas que comienzan bien, luego por diferentes motivos pelean todo el tiempo, se dicen cosas horribles, lloran desconsolados, se dejan un tiempo, vuelven a hablar y a decidir arreglar las cosas, por un tiempo corto todo funciona, hasta que nuevamente vuelve a repetirse todo, se dañan más que lo que se habían dañado antes, para terminar de todas formas esa relación. Y es que una relación de noviazgo en donde el 80% del tiempo sean peleas difícilmente llegara a un buen fin, ¿O a caso quieres seguir las peleas y maltratos verbales en el matrimonio?, ¡De ninguna forma!, es allí en donde se tiene que aplicar el titulo de este artículo, porque hay momentos en donde debes de dejar de decidir con el corazón, para decidir con la cabeza.
Conozco chicas y chicos que están convencidos que esa relación que llevan con determinada persona NO TERMINARA BIEN o que simplemente no es la persona que quieren para casarse, sin embargo, sus sentimientos, el hecho de no sentirse solos o sentirte queridos por alguien los lleva a seguir en una relación dañina que lo único que hace lastimar su corazón
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