EL ESPÍRITU DE UNIMINUTO

La fundación del Colegio Minuto de Dios , en 1958, delimito la dimensión educadora de la obra que debía finalizarse en la formación de profesionales comprendidos con la filosofía Minuto de Dios. El 31 de agosto de 1988 se firmó el acta de constitución de la Corporación Universitaria Minuto de Dios.

El espíritu de la universidad Uniminuto es la visión amplia, esfuerzo y arduo trabajo de un hombre líder, amigo de Dios, el padre Rafael Gracia-Herreros, que con gran amor y servicio hacia sus semejantes reestructuró el pensamiento, la actitud y el obrar de muchos colombianos, fue el motor transformador de la realidad de la comunidad colombiana pues ha logrado contribuir abundantemente en la dignidad de la vida de muchos jóvenes que no podían pagar las grandes sumas que exigían las universidades privadas de turno.

Con la construcción del plan educativo superior el padre Rafael García-Herreros brindó una gran oportunidad para que los jóvenes de escasos recursos pudieran acceder a la realización de sus estudios superiores, con la creación de la universidad Uniminuto “Educación de calidad al alcance de todos” se abren las puertas posibilitando las oportunidades de desarrollo que exige el medio laboral para su incursión en el.

Este hombre inteligente sabía que el hombre es un ser integral por lo tanto llevó a la práctica políticas de bienestar social sostenibles para las presentes y futuras generaciones no solo con las viviendas comunales sino con un proyecto educativo completo. Un programa totalmente estructurado de gran envergadura hecho realidad a través de la educación fue un objetivo principal de su fundador Rafael García-Herreros, esté proyecto educativo sigue ampliándose a nivel nacional e internacional porque cuenta con una variada gama de diversos programas de Educación Superior de calidad y servicios que imparten calidad de vida para toda la comunidad.

LA MISIÓN DE LA UNIVERSIDAD UNIMINUTO

Formar profesionales responsables, técnicamente competitivos, éticamente orientados y socialmente comprometidos. Uniminuto promueve el desarrollo integral de las personas, las comunidades y las organizaciones, promoviendo en ellas sus potencialidades, en expresiones de actitudes humanas, cristianas, ciudadanas y de servicio a la sociedad. Contribuye en la construcción de una nación más justa, democrática, participativa y solidaria, que respete los valores culturales propios y de otras culturas.

El minuto de Dios ha optado por un modelo educativo praxeológico que consiste en una serie de parámetros adquiridos por el individuo a través de la educación secular, cultural, moral y ética que tiene su campo de acción en la interacción (práctica) del individuo en sociedad pues esta le permite (reflexionar y mirar las acciones realizadas con mayor objetividad) adquirir madurez, analizar su actuar para mejorar e implementar destrezas desde su quehacer a medida que desarrolla una personalidad cálida y potencialmente integral; esta teoría (proceso) flexible de la praxis indica estar basado en la práctica reflexiva para mejorar la condición humana por medio de experimentación, evolución, conocimiento e interacción social.

Esta metodología es óptima para la comunidad universitaria de Uniminuto pues existen varios beneficios al usar esta técnica; podemos ser conscientes de nuestro actuar en vías de mejorar eficaz y eficientemente en la realización de nuestro quehacer profesional (más y mejor preparados) también en nuestro crecimiento personal ya que esta teoría contiene elementos realmente valiosos como la observación, el análisis, la evaluación, el seguimiento, la orientación que amplían nuestra visión para contribuir positivamente en la reconstrucción de nuestro entorno y aumenta nuestro conocimiento, a partir de competencias bien estructuradas.

El espíritu de Uniminuto se hace realidad cuando cada proyecto educativo contiene las políticas de su fundador el padre Rafael

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