El manejo de los desechos tecnológicos

El manejo de los desechos tecnológicos es un tema importante. Las empresas a nivel mundial le han dado un giro importante en cuanto a la manufactura de sus productos mediante el reemplazo o control de materiales que contribuyan a la conservación del medio ambiente y que no pongan en peligro la salud humana, según uno de los fabricantes de computadoras, Toshiba.

Al referirse el caso específico de Centroamérica, Toshiba dice que el tratamiento de desechos electrónicos en esta región “es un tema que recién empieza a tomar fuerza en la región, como lo es en general el campo del reciclaje”.

Paralelo al tema de las políticas que puedan implementarse, ya empiezan a observarse iniciativas independientes de personas que han apostado al reciclaje como su fuente de ingresos. En Costa Rica, por ejemplo, grupos de personas operan camiones recolectores de todo tipo de desechos que venden a empresas recicladoras.

En el caso de las computadoras, las desarman, separan el aluminio y cobre, y entregan el resto del metal, que es lo que tiene menor precio. El aluminio y el cobre, así como las baterías de carro, que es lo que mejor se paga (alrededor de 5.38 dólares el kilo), los venden por aparte.

“Todo el material reciclado se envía en contenedores para luego ser exportado a China. En el caso de los CPU, estas pequeñas empresas recicladoras los desarman, extraen las memorias, discos duros, para venderlos posteriormente en mercados populares, donde clientes, usualmente técnicos en computación, los utilizan como insumo para rearmar o reparar computadoras”, asegura Toshiba en una nota enviada a este periódico.

Agrega que pueden afirmar con toda seguridad que el ciclo de vida de los productos cada vez se acorta más por la rapidez con que evoluciona el desarrollo tecnológico.

¿Qué sucede con los equipos de cómputo una vez que caen en desuso?

Toshiba tiene conocimiento de la existencia de iniciativas locales, individuos que han visto en el reciclaje una forma de ganarse la vida, de hecho es una industria que empieza a tomar fuerza en Centroamérica y a generar inversiones locales y puestos de trabajo.

No obstante, aunque las empresas que producen equipos eléctricos y electrónicos, como el caso de Toshiba, cumplan con normas como la RoHS (Restricciones de Desechos Peligrosos) emitida por la Unión Europea en octubre de 2005, siempre habrá desperdicio qué separar o reciclar que genera recursos económicos.

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