Ensayo acerca de El Arca de la Alianza y El Maestro Secreto

A∴L∴G∴D∴G∴A∴D∴U∴

EL ARCA DE LA ALIANZA

SU SIGNIFICACIÓN HISTORICA Y SIMBOLICA

INTRODUCCIÓN

“El Arca de la Alianza en las grandes batallas de cuyo resultado dependía la victoria o la ruina de todo el pueblo, iba en medio del ejercito, para que el pueblo, viendo presente, por así decirlo, a su rey, combatiera con todas sus fuerza”. – Baruch Spinoza.

El Arca de a Alianza es, sin lugar a dudas, la expresión más pura del misterio. Ni el Triangulo de las Bermudas, ni la Gran Pirámide, ni mucho menos las rocas de Stonehenge han despertado tanto la curiosidad entre los entendidos (y entre no entendidos también).

No fueron las aventuras de Indianas Jones que llevaron a muchos de nosotros a interesarnos (de manera más o menos formal) a la arqueología. Es lo que representa en nosotros, la excusa que nos llevo a soñar por ser quienes finalmente desenterrásemos de las áreas del desierto tan místico artefacto.

El Arca de la Alianza es, junto al otro objeto místico del que no hablaremos hoy (y me refiero al Santo Grial), representación vivida de la curiosidad. Y no debería serlo de otra manera.  El Arca es la conexión directa entre los hombres y el misterio. Es el intercomunicador ente lo humano y lo divino. Porque nuestro relación con el misterio de Dios, nos acerca a lo eterno en nosotros, nos recuerda que somos humanos; alejándonos, por consiguiente, cada vez más del reino de las bestias.

Desde sus orígenes el Arca ha estado rodeada de fascinación y misterio. Fue construida según las indicaciones del mismísimo Yahvé. Cuestión sumamente enigmática considerando que el mismo creador del cielo y de la tierra requirió de manos humanas para su creación. ¿Por qué un ser tan poderoso que separo el día de la noche, hizo llover alimento desde el cielo y creo al hombre a su imagen y semejanza, requirió de ayuda terrenal para construir un objeto que, comparados con sus otras creaciones, pareciera más simple y accesible?; ¿No será que esa Arca nos indica que no sólo somos el Plan de Dios; sino que, Dios es el Plan del Hombre. No será que el Arca representa la conexión de nosotros con nuestra parte Divina; así como la conexión de Dios con su parte terrenal?... ¿No será más claro el significado de “Alianza” que contiene el Arca, en el entendido es un vinculo entre dos seres interdependientes?. En definitiva, no será Dios tan humano como nosotros tan Divinos?

Es tal el interés de los hombre por el Arca que, a lo largo de su historia,  muchos intentaron hacerse de ella. Y lo hicieron con nefastas consecuencias. Así como los enemigos de Israel trataron de adueñarse de la fuerza bélica que representaba, la Francmasonería  también ha tratado de hacerse de ella. No para destruir ejércitos y montañas, sino para robarles sus significados, su simbología; como la única forma y mas cercanas de pellizcar el vidrio del misterio divino.

I.-        NOCIONES DEL ARCA DE LA ALIANZA

        Una de las primeras referencias que se tiene respecto de “Arca de la Alianza”, se encuentra en el Capítulo 30,  Versículo 26 del Libro del Éxodo de la Biblia. Dicha mención se da en el contexto de la descripción del “Altar del Incienso” del que forma parte el místico “Tabernáculo” judío. Así, el texto bíblico luego de prescribir la forma como se confeccionara el ungüento sagrado o aceite de la unción, indica que  “Con él ungirás el Tabernáculo de reunión, el Arca del Testimonio”.

        Debido a su importancia, el Arca de la Alianza se encontraba emplazada en el Kodesh HaKodshim o Sanctasanctórum o “Santo de los Santos”, y que correspondía al lugar más sagrado del referido Tabernáculo. Debemos recordar que el Tabernáculo, según las mismas descripciones bíblicas, era una especie de Santuario itinerante dedicado a Yahvé, extendiéndose como lugar de adoración hasta la construcción del Templo de Jerusalén o también conocido  como “Templo de Salomón”.

        A lo largo del Texto Sagrado, el Arca recibe diversas denominaciones, tales como Arca del Testimonio (Éxodo 25,16 y 22; 26,33; etc.), el Arca del Testamento (Éxodo 30,26), el Arca de la Alianza de Yahveh (Núm. 10,33; Deut. 10,8; etc.), el Arca de la Alianza (Josué 3,6; etc.); el Arca de Dios (1 Samuel 3,3; etc.), entre otros.

        En cuanto a su descripción, el Arca era una especie de baúl o cofre, cuyas medias corresponderían a 112,5 cms. de largo (dos codos y medio), 67 cms. de ancho (un codo y medio) y 45 cms. de ancho (un codo). Su hechura era de madera de acacia, revestida por dentro y por fuera con oro y tenia a su alrededor rebordes del mismo material precioso. En sus bordes superiores, contaba con cuatro manillas doradas, por el que se insertaba dos varales de madera de acacia revestidos de oro. Su Tapa o “Propiciatorio” también era de oro; y, custodiándola, dos querubines de oro macizo enfrentados cara a cara con sus alas extendidas.

        En relación a su confección, en cuanto a su forma y los materiales utilizados, fueron ordenados por Jehová a través de una revelación a Moisés  (Éxodo 25, 10 al 22); y, fabricados materialmente por Besalel, hijo de Uri y de Jur, natural de la Tribu de Judá.

        En un primer momento, y dentro de sus funciones principales, se encontraba la de contener el “Testimonio”, esto es, las Tablas de la Ley. Posteriormente, se ordenó a Moisés que en ella depositará una vasija de oro con Maná  (especie de comida divina), la Vara florecida de Aarón y el Pectoral Sacerdotal de Aarón. Así, y sin quitarle el carácter de Divino, pareciera que en sus comienzos, el Arca sólo desempeñaba el oficio de “depósito” de objetos sagrados. Con el tiempo, este mismo artefacto tomó el estatus del lugar o morada en la que residía Yahvé; cuestión que, en la practica, no sólo se convirtió en “el señor esta con nosotros”, sino también, convertirse en una suerte de “sistema de defensa judaico”. Una verdadera arma de destrucción masiva.

        Después de ser objeto de un par de robos, finalmente luego de la caída del Jerusalén en 587 D.C., se perdió todo rastro del Arca. Entre las teorías más aceptadas relacionados sobre su ubicación actual, se encuentra aquella contenida en una Carta dirigida a los Judíos de Egipto  en la que se señala que habría sido escondida en “una estancia de forma de cueva” por el profeta Jeremías; y que, “al volver una de sus acompañantes para marca el camino, no pudieron encontrarlo”.

II.-        EL SIMBOLISMO RELIGIOSO DEL ARCA.

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