JESUS PROMESA DE DIOS

Jesús Promesa de Dios: Isaías 7:14

Los seres humanos por naturaleza estamos llamados a responder al llamado que nos hace el Señor. Dios, con su inmenso amor nos crea para comunicarnos con él y asociarnos con otros seres humanos, para así darle gloria y alabanza.

Y es tal este amor, que Dios tiene planes, promesas para acercar al hombre más a él, los cuales manifiesta y cumple a través de su hijo Jesús, que significa “Jehová es mi salvador” y es una versión griega del nombre hebreo Josué”.

Por lo dicho comprendemos lo significo este nombre en el Antiguo Testamento de dos maneras:

1. Jesús es nuestro capitán de Salvación, el guía, que siguiendo la voluntad de Dios nos muestra el camino y nos acompaña al encuentro con su Padre, siendo para Jesús la obediencia lo primordial a seguir, en el plan que Dios tiene para la humanidad: amor y libertad.

2. Jesús es el gran sacerdote, que nos representa ante Dios.

El nacimiento de Jesús fue la promesa dicha a Isaías, para que fuese Jesús, el reconciliador entre su Padre y los hombres. Dios tenía un plan concreto para la llegada de su hijo amado, todo lo que pasa con Jesús desde su nacimiento hasta su muerte, había sido profetizado mucho antes de que ocurriera porque esa era la profecía, el verbo hecho carne que habría de venir para ser el puente entre la humanidad y su Padre amado.

Sin embargo para muchos esta promesa de amor que nos trae Jesús, es utilizada en contra para mostrar una religión que se reduce a prácticas externas, dando a conocer un Dios imponente y castigador de quien no elija su camino, prevaleciendo una visión mundana donde el hombre quiere ser dueño y conductor de su vida, apartando a Dios y a su vez el plan que él tiene para nosotros (Ef 1,3-10) la felicidad eterna.

Pero la entrega que hace Jesús en la cruz por todos los hombres, cambia totalmente la mirada distorsionada que se tiene de su Padre. Mostrando un Dios lleno de amor, dispuesto a entregar a su propio hijo, para restablecer con el hombre, el vínculo roto por el pecado.

Esa es la profecía cumplida que Dios trae por medio de su hijo, un proyecto de vida donde podremos ser plenamente felices, porque él sabe como alcanzarla y conoce las necesidades de cada uno, llevándonos por un camino seguro de vida, sin imponer en ningún momento su voluntad, por el contrario manda a Jesús para que muestre el amor y la fraternidad que él ofrece, dejando a plena libertad lo que cada quien decida elegir o no, alejándonos de un mundo donde las presiones del poder , tener y placer nos mantienen alejados de la verdadera felicidad.

Conclusión:

Jesús como promesa de Dios, es el camino seguro a una vida llena de amor y libertad, más aquel que no sepa elegir el camino de la felicidad, haciendo mal uso de esa libertad se encontrara con su el sufrimiento y la muerte.

El amor y la libertad que nos

...