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Judas en la Mision de Dios


Enviado por   •  30 de Septiembre de 2015  •  Ensayo  •  2.933 Palabras (12 Páginas)  •  221 Visitas

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EL LIBRO DE JUDAS EN LA MISION DE DIOS

Curso: Teología de la Misión.

Pablo Jonathan Cruz Ávila.

Fecha: 19 de Noviembre del 2014.

Introducción

Quisiera comenzar confesando mi incredulidad inicial sobre lo que Christopher Wright establece en su libro ¨La Misión de Dios¨. Dice Wright que toda la Biblia habla sobre la misión de Dios, y no solamente textos aislados que nos hemos acostumbrado a citar cuando hablamos de ese tema .

Quise poner a prueba su argumento y decide usar uno de los libros del Nuevo Testamento que poco, por no decir nada, hemos visto ser considerado por los eruditos bíblicos, para un tema de la ¨misión de Dios¨; me refiero al libro de Judas. Algunos comentaristas recalcan que Judas es uno de los libros que probablemente ha sido de los más inadvertidos en la Biblia. Quizás se debe a que no tiene el volumen llamativo tanto para su estudio como para su proclamación . Por lo cual pensé ¿Qué puede hablarnos sobre la misión de Dios?

Leí varias veces este pequeñísimo libro y aparentemente no encontré nada sobre la misión de Dios; pensé en ese momento, que Judas es solo un libro apologético y que hemos de interpretarlo, y enseñarlo como lo es, apologético. Sin embargo la voz del Espíritu de Dios, durante mi búsqueda me oriento. Decidí continuar leyendo la carta, pero antes tome un tiempo más profundo para orar, y decirle al Señor ¿Qué tanto este pequeño libro habla sobre Tú misión? y ¿Particularmente que aplicación podemos encontrar en este libro, de esa misión, para nuestro tiempo? Inmediatamente después de mi oración el Señor abrió mi entendimiento, y fue increíble lo que Él pudo iluminarme sobre su misión, de esta hoja del Nuevo Testamento que no contiene capítulos, sino solo veinticinco versículos.

Llegue a la conclusión de que, por supuesto, Judas es una carta que se dedica a la defensa de la fe, pero lo que ignoraba es que este tema, de la defensa de nuestra fe, es un tema bastante amplio; que no busca, en ningún momento, elevar nuestro orgullo, jactancia, y celo humano, de que somos portadores de la verdad, en contraste a las falsas sectas y religiones que se levantan. Sino que esta carta es parte integral de la Misión de Dios, es decir; se escribió para contribuir a uno de los objetivos primarios de esa misión, el establecimiento de la iglesia, y es lo que me propongo en este trabajo explicar. Veamos cada parte del libro de Judas.

La Salutación.

Desde sus inicios este libro revela lo que es la Misión de Dios; digo esto, por la manera en que Judas se identifica a su audiencia. En primer lugar él se identifica como siervo de Jesucristo ¿Cuál es el fin de la misión de Dios? Que todo hombre se rinda al señorío de su hijo, el Salvador del mundo. Ahí vemos cumplida la misión de Dios en el hombre. Pablo lo declaro en su carta a la iglesia de Filipos en su segundo capítulo; dice el Apóstol: Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. Vv. 9-11. Como dice Williams Barclay en su comentario del libro. ¨Judas consideraba que no tenía más que un objetivo y una distinción en la vida; el estar siempre a disposición de Jesús para servirle en Su causa. La más grande gloria – dice Barclay - que ningún cristiano puede alcanzar es la de serle útil a Jesucristo ¨.

Creo que cualquiera que confiesa haber tenido una relación con Cristo, sin tener una disposición de entera adoración a ÉL, todavía no ha visto realizada la misión de Dios en su vida. Este es el propósito de nuestra redención, glorificarle con nuestra vida entera, glorificarle siendo un recurso en una posición de siervo, para contribuir al engrandecimiento de su reino aquí en la tierra en, por, y a través de su iglesia.

Pero además Judas se idéntica como el hermano de Jacobo (Santiago). La mayoría de comentaristas afirma que esto se debió a que Judas era un hombre que estaba contento con ocupar un segundo lugar – destacando así su humildad -. Además no era tan conocido como Santiago, por lo cual se contentaba con que le conocieran como el hermano de Santiago . Y aunque haya razón en ambos argumentos, esto no nos impide ubicar a Judas como testigo en primer grado, de la misión de Dios, que nuestro Señor Jesús vino a realizar. Ya sabemos que su conversión no es hasta después de la resurrección de Cristo; y que también a pesar de su inicial incredulidad en su medio hermano Jesús, fue testigo de muchas de las cosas que Jesús dijo e hizo. Dice la Biblia: Así que los hermanos de Jesús le dijeron: —Deberías salir de aquí e ir a Judea, para que tus discípulos vean las obras que realizas, porque nadie que quiera darse a conocer actúa en secreto. Ya que haces estas cosas, deja que el mundo te conozca. Lo cierto es que ni siquiera sus hermanos creían en él. Por eso Jesús les dijo: —Para ustedes cualquier tiempo es bueno, pero el tiempo mío aún no ha llegado. S. Jn. 7:3-6.

Por lo cual Judas está totalmente calificado para compartirnos sobre la misión de Dios; seguramente esta fue una de las cosas que el Espíritu de Dios considero para que le tuviéramos en nuestro canon neo - testamentario.

Siendo así, hemos de interpretar este libro bajo este contexto, Judas fue conocedor de la Misión de Dios; por lo cual su escrito busca contribuir a esa Misión, desde una perspectiva de establecimiento y confirmación de la iglesia. He de decir que hemos sido muy débiles en estos dos procesos; quizás porque se ha considerado que la Misión de Dios, solamente tiene que ver con ir a un lugar donde hay poco porcentaje de cristianismo, evangelizamos el lugar, logramos congregar a un grupo de creyentes, luego les declaramos iglesia, y nos vamos sin volver a saber de ellos; creo que no está mal el proceso, pero no está completo ¿Qué del establecimiento y la confirmación de esta nueva congregación? También son parte de la misión de Dios.

El Apóstol Pablo dio ejemplo de ello, en el libro de los Hechos se relata como Pablo regresaba a aquellos lugares que inicialmente presento el evangelio, para establecerles y confirmarles en la fe. La Biblia dice: Después de anunciar las buenas nuevas en aquella ciudad y de hacer muchos discípulos, Pablo y Bernabé regresaron a Listra, a Iconio y a Antioquía, fortaleciendo a los discípulos y animándolos a perseverar en la fe. «Es necesario pasar por muchas dificultades para entrar en el reino de Dios»,

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