La Fe, Testimonio De Vida
Enviado por joseamado2005 • 16 de Octubre de 2013 • 1.013 Palabras (5 Páginas) • 783 Visitas
La Fé Como Testimonio De Vida
Tener fe es aceptar la palabra de otro, entendiéndola y confiando que es honesto y por lo tanto que su palabra es veraz. El motivo básico de toda fe es la autoridad (el derecho de ser creído) de aquel a quien se cree. Este reconocimiento de autoridad ocurre cuando se acepta que el o ella tiene conocimiento sobre lo que dice y posee integridad de manera que no engaña.
Se trata de fe divina cuando es Dios a quien se cree. Se trata de fe humana cuando se cree a un ser humano.
Hay lugar para ambos tipos de fe (divina y humana) pero en diferente grado. A Dios le debemos fe absoluta porque El tiene absoluto conocimiento y es absolutamente veraz.
"La fe es adhesión a Dios en el claroscuro del misterio; sin embargo es también búsqueda con el deseo de conocer más y mejor la verdad revelada" -JP II
La fe divina es una virtud teologal y procede de un don de Dios que nos capacita para reconocer que es Dios quien habla y enseña en las Sagradas Escrituras y en la Iglesia. Quien tiene fe sabe que por encima de toda duda y preocupaciones de este mundo las enseñanzas de la fe son las enseñanzas de Dios y por lo tanto son ciertas y buenas.
El testimonio es una palabra que significa dar una declaración que afirma o asegura una cosa. También representa una prueba, justificación y comprobación de la certeza o existencia de una cosa.
El testimonio cristiano como valor es más que una afirmación o declaración, es el ejemplo de vida que damos a los demás a partir de nuestros principios y valores cristianos. Es la evidencia real del cambio que Jesucristo ha realizado en nuestras vidas.
El cristiano está llamado a dar testimonio de su fe verdadera en Jesucristo a través del ejemplo de vida, ya sea por medio de palabras, actos o gestos. Y esto no para vanagloria propia sino para que vean y crean en el Señor Jesucristo. Pero, como suele suceder en toda práctica de un valor, no siempre todos son consecuentes con los mismos. Hay los que hablan y pregonan la vigencia de algún valor y luego con sus actos contradicen todo lo afirmado. En estos casos solemos decir: mal testimonio de vida. Un ejemplo lo tenemos en Mateo 23:1-12, cuando Jesús previene a sus discípulos contra los escribas y fariseos, que se habían sentado en la cátedra de Moisés y enseñaban al pueblo las Escrituras, pero sus vidas estaban muy lejos de lo que enseñaban: “Haced y cumplid todo cuanto os digan; pero no hagáis según sus obras, pues dicen pero no hacen”. Por otro lado están aquellos que están dispuestos a dar su vida por sus ideales y su fe en Cristo. De los cuales tenemos muchos ejemplos. Un ejemplo es la vida de Esteban (Hechos 7). El primer mártir de la Iglesia.
El testimonio de vida tiene dos aspectos: el testimonio personal y el testimonio colectivo. En el primer caso hemos destacado el testimonio personal de los creyentes. Pero también
...