La Religion Y La Vida
Enviado por Andersonj • 13 de Abril de 2012 • 1.444 Palabras (6 Páginas) • 460 Visitas
LA RELIGION Y EL HOMICIDIO
Judaísmo
En primera instancia, la muerte es la continuación de la vida, el placer que se reciba allá depende del trabajo que se realice aquí, en vida. Luchar por la vida y no morir por la muerte. El homicidio y el suicidio son vistos como actos deplorables, pecaminosos y opuestos al deseo divino. La única diferencia entre ambos, es que el suicidio es el único imposible de reparar por medio de la TESHUVÁ u honesto y absoluto arrepentimiento. Analicemos un pasaje de la Torá:
“Por que ciertamente por vuestra propia sangre pediré cuentas ….. Yo pediré cuentas a cada uno por la vida del hombre” Génesis 9: 5 – Bereshit
Aquí se plantea la posibilidad y se prohíbe el homicidio sobre otros o sobre uno mismo. En otro pasaje, la Torá, también observa que existe la posibilidad de que el homicidio sea cometido por una persona desequilibrada psíquicamente, a quien se puede compadecer y comprender, pero no aprobar su decisión, ya que la muerte no es el escape de la muerte, como tampoco la muerte es el escape de la vida. El priorizar la vida y lo vital, preserva una de las normas hebráicas principales: PRESERVAR LA VIDA HASTA EL ULTIMO ALIENTO.
Cristianismo
La transgresión del quinto mandamiento es considerado un pecado mortal, No Matar es indiscutible. La aberración metafísica que implica terminar con una vida humana corrompe el alma de los hombres, lo llena de todo el odio del que es capaz de sentir un ser humano. Que un hombre mate a otro hombre no es una necesidad biológica a diferencia de los animales. Matar es excluir del amor, es lo opuesto a la bondad, a amar al prójimo como a uno mismo, que junto con amar a Dios sobre todas las cosas sintetizan los 10 mandamientos de la Ley de Dios. Si bien el V mandamiento es el testimonio fidedigno de la resistencia al mal, anteponiendo la victoria del bien, la verdad y la no violencia sin importar el sufrimiento, la vejación, el derecho o la vida misma, también la legítima defensa es una causa de justificación y está aprobada como eximición de culpa
“Vence el mal con el bien” Romanos 12, 21
Islam
La perversidad, obscenidad y abominación, son las tres prohibiciones básicas que constituyen las HUKM o leyes divinas de Islam. Estos actos prohibidos muestran el perjuicio, daño espiritual y material que traen aparejados. El Corán no prohíbe lo bueno, productivo, sano y saludable: las comidas, bebidas y conductas humanas naturales tales como la procreación, ayunos en fechas sagradas, etc., pero estas serán prohibidas sí y solo sí han sido contaminadas por las tres prohibiciones que perjudican y ponen en peligro el alma y el cuerpo que deben ser preservados del mal y del peligro. Las Shari’ah o leyes divinas que organizan la vida humana previniendo la miseria, proporcionando felicidad, salud mental y física, entran en vigencia obligatoria desde que se es MUKAL-LAF (pubescente), allí, se podrán preservar las maravillas de la creación y la naturaleza. Las Hukm o leyes divinas, ayudan a resguardar las relaciones del hombre: Con su Creador, mediante la plegaria, el ayuno la peregrinación a La Meca por lo menos una vez en la vida; Consigo mismo, con rituales de autopurificación, atender a sus necesidades corporales e higiénicas, Con sus semejantes: la familia la sociedad, la política, el derecho, etc., Con los animales, y todo recurso natural que sea creación de Allah.
LA MORAL Y EL HOMICIDIO
“Contemplar la virtud en su verdadera figura no significa otra cosa que representar la moralidad despejada de todo lo sensible y de todo adorno, recompensa o egoísm, oscurece la moralidad todo lo que aparece a las inclinaciones como excitante." Fundamentación de la Metafísica de las costumbres, I. Kant
La moral es unilateral, incoercible, autónoma y derivada de la razón. Si bien la moral pertenece al fuero interno, a la autoconciencia, no está inspirada en castigo, pasión o recompensa divina, si no contradeciría a la razón. La moral busca regular la vida del hombre conduciéndolo hacia el perfeccionamiento individual mediante la práctica de las virtudes como el fin natural del hombre, es decir “por el deber”, las sanciones sólo son espirituales y autónomas. En “La religión dentro
...