La familia y los nuevos retos sociales

Escuela de novios

Tema 1 - La familia y los nuevos retos sociales

¿Cuál es la situación de las familias que conoces?

Conocemos todo tipo de familias, especialmente destaca por su mayoría las familias con hijos. De hecho de entre nuestros familiares más cercanos la gran mayoría viven aún padres e hijos salvo algún familiar que se separaron y han rehecho su vida.

También conocemos parejas que aún no han dado el paso hacia el matrimonio por decisión propia o motivos laborales.

¿Cuáles son tus pretensiones respecto al noviazgo y a la formación de una nueva familia?

En primer lugar, las pretensiones respecto al noviazgo siempre ha ido en dirección al entendimiento, la comunicación y que cada uno aporte situaciones positivas hacia el otro.

En cuanto a formar una nueva familia coincidimos en que podemos plantearnos una nueva familia una vez que personalmente hemos conseguido una estabilidad tanto en salud como financiera y como pareja. Una vez que tenemos una base sólida ambos somos conscientes que es cuando podemos pensar en formar una familia.

¿Qué consecuencias de la condición postmoderna están afectando a tu noviazgo? ¿Cómo vas a reaccionar?

Ahora mismo como indica el libro, el noviazgo está en plenos cambios. Nosotros siempre hemos tenido las ideas muy claras en cuanto a cómo queremos mantener nuestra relación, y en ese sentido siempre hemos sido muy tradicionales

Tema 2. El amor conyugal

¿Qué significa que la vocación del hombre es amar?

Los hombres vivimos en comunidad por ello es necesario amar al prójimo y tratar de ayudar a conseguir el bienestar de los demás

¿Qué os ha llamado la atención de las palabras del consentimiento?

¿Qué destacas como positivo de vuestro amor y qué se podría mejorar?

Que nos conocemos y nos entendemos perfectamente, saber que la otra persona estará ahí para apoyarte y que tenemos la misma idea de futuro con las ideas claras.

Siempre hay cosas que mejorar, entre otras el tratar de mantener diálogos y conversaciones en tonos estables sin subidas de voz y siempre respetando la opinión del otro, es decir, saber escuchar también

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