MONOGRAFÍA DE SANTIDAD JOSE

INTRODUCCIÓN

             Siempre hemos escuchado decir que no es  fácil vivir en santidad, y se plantean preguntas ¿Cómo podemos vivir en santidad en un mundo saturado de pecado?  En realidad es tan difícil porque el mundo se encuentra perdido y va de mal en peor; pecado por todos lados, pero como cristianos estamos llamados a ser santos; así como les tocó vivir a estos dos grandes  hombres de la Biblia Noé  y Job.

              En el primer capítulo veremos a Job, una enseñanza real de cómo vivir en santidad, basado en su fidelidad, obediencia y el sometimiento de su voluntad a la de Dios.

            En el segundo capítulo estudiaremos sobre cómo la vida inspiradora de Noé hacia la santidad  actual; dejándonos un claro ejemplo siendo un hombre leal a su familia, su fidelidad al Creador, y la diligencia, paciencia que lo caracterizaba.

CAPÍTULO  I

JOB, UNA ENSEÑANZA REAL DE COMO VIVIR  UNA VIDA DE SANTIDAD

        En este mundo los cristianos tendremos dificultades, problemas, luchas, pruebas y aflicciones, eso es lo normal. Este es el caso de la vida real de Job en la que vivió; desarrollaremos algunos puntos de vista de este gran siervo de Dios. Este capítulo está dividido en tres sub puntos muy importantes; primeramente la fidelidad a Dios, en segundo lugar su obediencia a Dios y finalmente sometió su voluntad a la de Dios.

1. Se mantuvo fiel a Dios.

        Job es un ejemplo para nuestras vidas de paciencia y fidelidad a Dios. Él se mantuvo fiel; Él entendió que cuanto más sufrimos y somos probados más necesitamos de Dios y de su fuerza, y él fue bendecido,  el Señor le devolvió la felicidad. Independientemente de las circunstancias por las que pasó, aún y cuando tuvo sufrimiento injusto.

         Aun cuando Dios mismo haya dado permiso a Satanás para traer aflicción a la vida del cristiano, para así poner a prueba su fidelidad con un caso de la vida real.  Mantengámonos fieles a Dios porque así seremos  salvos por Jesús, no sufriremos ya, no habrá dolor, ni llanto ni muerte. En ninguna versión de la Biblia encontraremos versículos que digan que como cristiano, este mundo  será nuestro paraíso sin problemas, ni que esta vida será mejor que la vida eterna.” Es normal que el cristiano pase por

problemas y dificultades, Jesús así lo enseñó y advirtió, pensar que porque una persona nace de nuevo y ahora se ocupa en obedecer a Dios y andar en santidad, no tendrá más problemas es absurdo y cualquier enseñanza en el sentido de que una vez que la persona nace de nuevo y es cristiana ya no hay más problemas, sino solo una vida feliz y de prosperidad y salud,  es una enseñanza falsa que no tiene soporte bíblico vamos a tener momentos cuando las pruebas van a venir así, pero así como Job mantengámonos firmes en los caminos del Señor. El Diccionario de la Real Academia nos dice lo siguiente:

Fidelidad se define como lealtad, observancia de la fe que alguien debe a otra persona o ser Supremo. Puntualidad, exactitud en la ejecución de algo. O también Capacidad de reproducir muy fielmente el sonido.

              Definitivamente no podemos afirmar  que la fidelidad sea otra cosa, que la dependencia total a Dios, de modo que la vida que una persona lleva sea agradable ante los ojos de nuestro Señor Jesucristo. La fidelidad se puede demostrar  fuera de la iglesia; es decir, en el hogar y en la sociedad con las personas de nuestro medio siendo leales y  teniendo esa capacidad de servir a los demás. Porque para esto la iglesia está llamada a servir y no ser servidos, ya que esta es una manera clave de reflejar a Cristo en nuestras.  

1. Obedeció a Dios.

        En todo y a través de todo Job obedeció al Señor, aún durante los problemas y ataques de Satanás que hayan sido inmerecidos. Amar a Dios y a Jesús implica obedecerlos; y la obediencia es la acción de obedecer las órdenes de alguien superior. Pero la obediencia se demuestra muchas veces en circunstancias difíciles así como le tocó pasar a Job para ver si en una situación real adversa, incluso con aflicciones, pérdidas y sufrimiento inmerecido obedecía a Dios. En realidad en nuestro mundo actual el cristiano es probado en este tipo de situaciones para ver si aun así el cristiano se mantiene obediente a Dios, o si acaso sólo se mantiene amando y obedeciendo a Dios cuando Dios lo bendice y las cosas le van bien. José Martínez comenta lo siguiente:

Nunca como en nuestro tiempo, cuando vivimos inmersos en una sociedad de consumo, se había visto el alcance de esta realidad con sus trágicas consecuencias. Muchos creyentes, aun sin caer en esa tentación, sin llegar a la apostasía, se contagian de materialismo y su vida espiritual aletargada en una atmosfera de tibieza (1975; p 30).

               Lo que nos quiere comunicar el autor es que la obediencia no solo se demuestra llegando fielmente a  la casa de Dios; lo que pasa es que muchas veces hay personas que llegan a una tibieza espiritual y se contagian con todo tipo de materialismo y dejan de lado sus prioridades como cristianos. Por el contrario el creyente siempre debe de ser evidenciado dentro de la sociedad. El cristiano que obedece a Dios,  da fruto, puede pasar por periodos difíciles, ya que Dios purifica y limpia al cristiano que da fruto para que lleve más fruto y ese proceso de depuración puede representar algunos momentos difíciles y dolorosos para el cristiano. “Todo pámpano que en mí no lleva fruto lo quitará; y todo aquél que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto”  (Juan 15: 2) Aunque el cristiano llegue a pasar por períodos en los cuales no tenga problemas, y todo le vaya bien, no le debe sorprender que vengan periodos en su vida cuando los problemas, dificultades y aflicciones se presentan.

Claramente podemos notar la obediencia de Job en todo momento, hasta su muerte puso  su confianza en el Creador y guardó todos sus mandamientos. Porque la misma Biblia nos dice que no había en la tierra otro varón como él, obediente en todo a su Creador.

1. Sometió su voluntad a la de Dios.

        En medio de cualquier circunstancia, por ilógica que sea siempre debemos andar en la voluntad de Dios. Estas cualidades difícilmente se pueden probar cuando el cristiano vive en la comodidad y total prosperidad, pero se pueden comprobar cuando el cristiano, como en el caso de Job, atraviesa por sufrimiento no merecido, sufrimiento que no viene a causa de pecado tal cual fue el caso de Job.

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