Recursos electrónicos

Universidad Nacional Autónoma de México[pic 1][pic 2]

Facultad de Filosofía y Letras

                   Colegio de Bibliotecología

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Actualmente existen una gran cantidad de recursos electrónicos. Tanta es su cantidad, que aún con un manejo perfecto de los OPAC su control va a ser imposible en un futuro próximo, por esto mismo, y por análisis a nuestras clases de historia, los recursos electrónicos son, en estos momentos, el soporte predominante en los acervos particulares y públicos, pero otro soporte vendrá en el futuro a sustituir al soporte digital, ya sea a corto o largo plazo. Por ende, debemos preparar a nuestro universo bibliográfico para un eventual reemplazo de recursos y soportes.

Pero actualmente nos hemos tenido que adaptar progresivamente al recurso vulgar, de moda: recurso el digital. Los medios digitales vinieron a transfigurar muchas tradiciones del bibliotecólogo: como el disponer, poseer, el ítem registrado en el catálogo, ya que en muchos casos se refiere el catalogo a recursos digitales como paginas web, bases de datos, documentos digitales, etc. Que por su modo de resguardo estos son imposibles de poseer.

Las nuevas tecnologías han puesto a varios autores y figuras a replantear muchos conceptos bibliográficos; Por ejemplo, los conceptos de referencia bibliográfica (relacionada con la existencia) y de cita catalográfica (relacionada con la posesión). Como ya no se poseen varios recursos digitales, no se pueden aplicar estos conceptos a los recursos digitales como si fueran soportes tradicionales, por lo que un cambio de normativa es casi una obligación.

Cabe aclarar igualmente la diferencia entre recurso digital y electrónico: el primero se refiere a la información procesada de manera numérica (bit por bit) y el segundo a recursos cuyo tratamiento y modalidad de acceso pueda ser analógico.

Así como existen dos modalidades de archivos digitales: Abiertos, los cuales pueden ser manipulados y alterados por todo aquel que desee aportar nueva información al documento. Y los cerrados, archivos los cuales son distribuidos sin posibilidad de procesar nuevos datos e información

Nuestra responsabilidad como bibliotecólogos de nuevo milenio es afrontar a los recursos digitales, identificar sus características, lo que les diferencia de otros tipos de recursos, saber como resolver los retos que su registro pueda afrontar y apoyarse en ellos para registrar ítems cuyo soporte sea tradicional. Que la relación entre profesional de la información y recurso novedoso no sea una elación de conflicto, sino una relación de apoyo reciproco donde el bibliotecólogo este plenamente informado y pueda dominar el uso y registro de los nuevos tipos de recursos que se le presenten a lo largo de su vida profesional.

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