COMPUTACIÓN E INTERNET “Cómo elaborar un documento en Word con tabla de contenidos y referencias”

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COMPUTACIÓN E INTERNET

“Cómo elaborar un documento en Word con tabla de contenidos y referencias”

EJERCICIO 1

ALUMNA: xxxxxxx

PROFESOR: xxxxx

Contenido

MANEJO ADECUADO DEL ESTRÉS        3

EL ESTRÉS Y NUESTRA SALUD        3

EL ESTRÉS Y NUESTRO CUERPO        3

APRENDAMOS A RECONOCER EL ESTRÉS        4

TÉCNICAS SALUDABLES PARA MANEJAR EL ESTRÉS        5

CUANDO CONSULTAR AL MÉDICO        6

CONCLUSIÓN        7

Bibliografía        8

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Manejo del estrés 1

MANEJO ADECUADO DEL ESTRÉS

EL ESTRÉS Y NUESTRA SALUD

El estrés es un sentimiento de tensión física o emocional, que puede surgir de situaciones o pensamientos que nos hagan sentir frustración, enojo o nerviosismo.

Cuando este se presenta en pequeños episodios, es considerado cómo estrés positivo^[1], pero cuando el estrés dura por mucho tiempo, entonces ya se puede tener un daño a la salud.

Actualmente se considera al estrés un sentimiento normal y se clasifica en dos tipos:

• Estrés agudo: de poca duración y que se puede experimentar cuando tenemos alguna pelea, cuando tenemos algún pendiente laboral, cuando se hace algo nuevo o emocionante y nos ayuda a controlar algunas situaciones de peligro.

• Estrés crónico: este tipo de estrés es el que dura un período de tiempo prolongado y algunas situaciones que lo origina son:  problemas económicos, problemas en el trabajo o en una relación personal, etc. si se pasa mucho tiempo con este tipo de estrés se puedo llegar a tener un problema de salud.

EL ESTRÉS Y NUESTRO CUERPO

Nuestro cuerpo reacciona ante el estrés al liberar hormonas que hacen que nuestro cerebro esté más alerta, causa que nuestros músculos se tensionen y aumenta nuestro pulso.  A corto plazo, estas reacciones pueden ser buenas ya que nos ayudan a manejar la situación que nos causa el estrés, pero cuando nuestro estrés es del tipo crónico, nuestro cuerpo se mantiene todo el tiempo alerta, incluso cuando no estemos en peligro, lo que nos puede ocasionar:

• Presión arterial alta
• Insuficiencia cardíaca
• Diabetes
• Obesidad
• Depresión o ansiedad
• Problemas en la piel (acné o eczema^[2])
• Problemas menstruales

Por otra parte, cuando nuestros niveles de estrés sobrepasan los límites normales, se pueden presentar síntomas físicos y emocionales que quizá no asociemos con el estrés como son:

• Diarrea o estreñimiento
• Mala memoria
• Falta de energía o concentración
• Dolores de cabeza
• Problemas sexuales
• Cuello o mandíbula rígidos
• Cansancio
• Problemas para dormir o dormir demasiado
• Pérdida o aumento de peso

APRENDAMOS A RECONOCER EL ESTRÉS

El primer paso para manejar el estrés es reconocer que este se encuentra presente en nuestra vida.  Posiblemente estemos enojados, que no podamos dormir o tengamos dolor de cabeza o malestar estomacal.  En el segundo paso debemos identificar qué lo provoca, por ejemplo, el trabajo, la escuela, la familia, el dinero, las relaciones, etc. y una vez que comprendamos de donde viene nuestro estrés podremos idear algunas maneras con las cuales lidiar con sus tensionantes^[3].

Para el manejo del estrés, debemos iniciar con una valoración sincera de cómo reaccionamos ante las situaciones que lo generan.  A partir de aquí, podremos contrarrestar las maneras poco saludables de reaccionar con técnicas más útiles.

A continuación, se describen algunas reacciones ante el estrés que son frecuentes y poco saludables:

• Dolor: inconscientemente apretamos la mandíbula o los puños o sentimos tensión muscular en el cuello y hombros que causan un dolor físico inexplicable.

• Comer en exceso: al sentirnos estresados empezamos a comer incluso cuando no tengamos hambre.
• Ira: el estrés nos puede originar mal carácter, cuando estamos bajo presión puede que discutamos con los compañeros de trabajo o con la familia por cualquier cosa y sin sentido.

• Llanto: el estrés nos puede desencadenar episodios de llanto sin una razón aparente, por sentirnos solos o aislados.
• Depresión: cuando nuestro nivel de estrés ya es demasiado para tolerarlo, creemos que una manera de evitarlo es faltar al trabajo, que nos sintamos desesperados o que nos rindamos.

• Negatividad: cuando no sobrellevamos el estrés, automáticamente pensamos y esperamos lo peor de la situación.

• Tabaquismo: se suele creer que fumar es una forma sencilla de relajación cuando estamos bajo presión, y en algunos casos se recurre al alcohol o las drogas creyendo que disminuyen los síntomas del estrés.

TÉCNICAS SALUDABLES PARA MANEJAR EL ESTRÉS

Existen diversas maneras de manejar el estrés, y para encontrar la adecuada, deberemos averiguar cual nos funciona mejor.  A continuación, se describen algunas:

• Reconocer las cosas que no podemos cambiar

• Aceptar que no podemos cambiar las cosas nos permite dejarlas ir y no alterarnos

• Evitar situaciones estresantes

• Siempre que podamos alejémonos de lo que nos origina estrés

• Hacer ejercicio

• Realizar actividades físicas todos los días es la manera más fácil de lidiar con el estrés ya que nuestro cerebro libera químicos que nos hacen sentir bien, y deberemos buscar algo que en verdad disfrutemos, caminar, nadar, bailar, etc.

• Cambiar la perspectiva

• Debemos intentar desarrollar una actitud positiva; es decir, reemplacemos los pensamientos negativos con pensamientos positivos.

• Hacer algo que disfrutemos

• Cuando sintamos estrés busquemos una actividad que nos haga continuar pero que disfrutemos, por ejemplo, leer un libro, ver una película, salir con un amigo, etc.

• Aprender nuevas maneras para relajarnos

• La práctica de algunas técnicas de relajación es una manera de lidiar con el estrés ya que nos ayudan a reducir nuestro ritmo cardiaco y reducir la presión sanguínea.

• Conectarse con nuestros seres queridos

• Pasar tiempos con amigos y familiares puede ayudarnos a sentirnos mejor y olvidarnos del estrés.

• Dormir lo suficiente

• Descansar lo suficiente durante la noche

• Mantener una dieta saludable

• Alimentarse de manera saludable nos ayuda a tener energía en nuestro cuerpo y mente, por lo que debemos evitar los alimentos altos en contenidos de azúcar.

• Aprender a decir NO

• Si nuestro estrés es causado por la realización de demasiadas tareas, debemos aprender a establecer límites y en caso necesario pedir ayuda si así no necesitamos.

CUANDO CONSULTAR AL MÉDICO

Si hemos probado los consejos anteriores y sentimos que todavía necesitamos ayudar para manejar el estrés, entonces es momento de visitar al médico, al cual deberemos hacerle las siguientes preguntas:

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