ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Canciones De Mundos Opuestos 2


Enviado por   •  2 de Julio de 2013  •  2.401 Palabras (10 Páginas)  •  276 Visitas

Página 1 de 10

Músculos de la órbita ocular (*)

La cavidad orbitaria contiene 7 músculos, todos ellos constituídos por fibras estríadas y, por lo tanto, voluntarios. Se les designa a veces con el nombre de músculos extrínsecos del ojo, en oposición a los músculos lisos, el músculo ciliar y el músculo del iris, que están situados dentro del globo ocular y constituyen músculos intrínsecos.

De los siete músculos de la órbita, el más alto preside los movimientos de elevación del párpado superior: es el músculo elevador del párpado superior.

Los otros seis están esencialmente destinados al ojo y se dividen en músculos rectos y músculos oblicuos.

Músculo elevador del párpado superior

El músculo elevador del párpado superior tiene la forma de un largo triángulo. cuyo vértice corresponde al fondo de la órbita y la base se despliega en el párpado superior por detrás del ligamento ancho. Es carnoso en su porción orbitaria y aponeurótico en su porción palpebral.

Inserciones: el elevador del párpado superior nace, por detrás, en el ala menor del esfenoides, inmediatamente por delante del agujero óptico, y también en la parte correspondiente de la vaina fibrosa del nervio óptico y del tendón de Zinn, por las dos bridas fibrosas de este último. De aquí se dirige hacia delante, hacia el borde superior de la órbita, y degenera, un poco por detrás de este borde, en una ancha aponeurosis, que continúa el trayecto del cuerpo muscular y constituye su tendón anterior. El cuerpo muscular comprende, pues, dos porciones que resultan de este cambio de orientación: una porción posterior, horizontal, orbitaria, y una porción vertical, anterior, palpebral. El tendón, que se extiende en anchura de un lado a otro de la órbita, solo está formado primero por fibras conjuntivas; pero muy pronto se ve aparecer en su cara profunda una capa de fibras musculares lisas. que lo refuerzan y le acompañan hasta el párpado. De ello resulta que el tendón anterior del músculo elevador del párpado superior se compone en realidad de dos capas distintas (*):

una capa anterior o superficial, de naturaleza conjuntiva

una capa posterior o profunda, formada por fibras musculares lisas.

La capa anterior, penetrando en el párpado, encuentra el ligamento ancho o septum orbitale; se confunde poco a poco con él y va a colocarse en la cara profunda del orbicular. Se resuelve entonces en una multitud de fascículos divergentes, que son muy visibles en los cortes frontales del párpado superior. De estos fascículos divergentes, que forman en su conjunto un ancho abanico cuya base se extiende de la parte media del párpado hasta su borde libre, los fascículos superiores se insinúan entre los del orbicular, llegan hasta delante de este músculo y, finalmente, se insertan en la cara profunda de la dermis cutánea.

Los fascículos medios parecen terminar entre el orbicular y el tarso en el tejido celular pretarsal, Por último, los fascículos inferiores, se insertan en la mitad inferior o en el tercio inferior de la cara anterior del tarso. Por último, lateralmente, las expansiones fibrosas llegan hasta el reborde orbitario, constituyendo las inserciones orbitarias del músculo; el fascículo orbitario externo, muy fuerte, se dirige hacia fuera, se insinúa por su borde libre en la glándula lagrimal, a la que divide en dos porciones, orbitaria y palpebral

El fascículo orbitario interno se sitúa bajo el tendón del músculo elevador del músculo oblicuo mayor. La capa posterior situada entre la capa precedente yla conjuntiva palpebral se compone de fibras lisas de dirección longitudinal. Su conjunto constituye el musculo palpebral superior. Estas fibras van a insertarse, por medio de pequeños tendones elásticos, en el borde superior del tarso.

El músculo elevador termina, pues, en el espesor del párpado superior por dos tendones, que difieren a la vez por su situación, por su estructura y por su modo de inserción: un tendón anterior o cutáneo, de naturaleza conjuntiva, que se inserta en la cara profunda de la piel, y un tendón posterior o tarsa, muscular, que se fija el borde superior del tarso.

Relaciones: El elevador del párpado superior ocupa sucesivamente la cavidad orbitaria y el espesor del párpado superior :

a) Dentro de la órbita, la cara superior cruzada por detrás por la inserción del oblicuo mayor, luego por el nervio patético, corresponde a la periórbita, por mediación de la vaina del músculo, luego de la grasa orbitaria, en la que el nervio frontal sigue al músculo en todo su recorrido. Por abajo (cara inferior) cubre el músculo recto superior, que sobresale un poco por fuera. Su borde interno corresponde al oblicuo mayor y al recto interno, de los que está separado por un espacio triangular de base anterior. En este espacio se ven la arteria oftálmica y el nervio nasal. Su borde externo corresponde al recto externo, del que está también sepa rado por un espacio triangular, por el cual pasan el nervio lagrimal y la arteria agrimal.

En la parte anterior y externa de la órbita el tendón del elevador se insinúa por su borde externo, entre las dos porciones de la glándula lagrimal

b) En el parpado la cara anterior o superficial del elevador está situada primero detrás del ligamento ancho, al que la une una capa celuloadiposa más o menos gruesa. Más lejos su tendón atraviesa oblicuamente la capa de tejido conjuntivo, situada detrás del orbicular, y finalmente desaparece en el espesor de este músculo. Su cara posterior o profunda se corresponde con la conjuntiva palpebral.

Acción: el músculo elevador, actúa sobre el párpado superior, al que lleva hacia arriba y atrás, descubriendo así la córnea y una parte de la esclerótica. Tiene por antagonista el músculo orbicular de los párpados, cuya contracción o tonicidad determina, la oclusión de la hendidura palpebral.

Músculos rectos del ojo

En número de cuatro, los músculos rectos del ojo nacen todos en el fondo de la cavidad orbitaria, en el contorno del agujero óptico y por dentro de la gran hendidura esfenoidal. Desde aquí se dirigen divergentes hacia el globo ocular y van a insertarse en la esclerótica algo por delante del ecuador. Según la situación que ocupan en la órbita y también en el globo del ojo, se llama a estos músculos recto superior, recto inferior, recto interno y recto externo.

Disposición general de los músculos rectos: considerados en su conjunto, los cuatro músculos rectos representan bastante bien una pirámide hueca, cuyo vértice corresponde al agujero óptico y cuya base abraza el globo del ojo. El nervio óptico atraviesa esta

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (15 Kb)
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com