La sociedad disfuncionalmente Tecnológica

La sociedad disfuncionalmente Tecnológica

Ideas introductorias

La industria 4.0 ya está aquí, se encuentra desde hace ya unos años en casi todo lo que hacemos y consumimos. Nació desde la llamada 4ta revolución industrial para transformar para siempre el cómo se hacen y se percibe todo lo que nos rodea. Los que somos de la  generación Millennials nos sorprendió ese “bicho raro” que parecía saber un poco de nosotros mismos, y que a muchos nos causaba desconcierto, fuimos la generación del quiebre, fuimos testigos de cómo en las bibliotecas de las escuelas y universidades, los libros especializados de consulta, hicieron espacios para ser ocupados por cajas negras con pantallas que pocos se atrevían a utilizar, la informática irrumpía en las propuestas educativas y los profesores explicaban a los estudiantes lo que significaban los famosos“ceros y uno”.

Bourdieu (1997) expone el hecho de que “la vida” constituye un todo, un conjunto coherente y orientado, que puede y debe ser aprehendido como expresión unitaria de un “propósito” subjetivo y objetivo, de un proyecto”. La llegada de la tecnología a la vida de esta generación Millennials, sería una pared empinada para escalar, un agujero negro que poco a poco y tras seguir instrucciones de los mas sabios del momento, podiamos iniciarnos en el mundo del paint a duras penas, y al mismo tiempo, los padres de esta generación, observaban la intromisión de este “bicho” en el lenguaje cotidiano del hogar que cada vez mas se parecía a un episodio de la serie animada Los Supersónicos, que por cierto es del año 1962 y que tuvo la intención que mostrar un futuro lejano de nuestra vida.

Este relato constituye una descripción de los cambios desfasados que hemos experimentado los seres humanos frente a la 4ta revolución industrial, pero al mismo tiempo esbozar ideas para intentar disminuir esa brecha de frecuencias; y es que para cada miembro de esto que llamamos planeta, nos afectó y sigue afectando de distintas formas.

Wifi en On

Desde el nacimiento de la Tecnología 4.0 mucho y poco es el camino recorrido por la humanidad, lo impensable para el año 2000 ahora ocurre casi de manera naturalizada, la sociedad transitó muchos caminos paralelos de acuerdo a sus intereses y ahora, la tecnología es utilizada por los humanos para lo “bueno”, pues la robótica, la impresión 3D, el nacimiento de las redes sociales, la inteligencia artificial, han servido para satisfacer necesidades, diagnosticar enfermedades, ayudar al prójimo, evidenciar situaciones en el mundo que antes de la tecnología las noticias llegaban tarde. La inmediatez del saber, está a un clic.

Pero también la tecnología le dió alcance a las prácticas sociales “malas”; estafas electrónicas, robos de identidades, extorsión telefónica, son solo tres de las conductas sociales negativas donde está involucrada la virtualidad. La sociedad emergió de la vida pre-internet y evolucionó como siempre lo ha hecho, desde los homosapiens hasta los llamados generación Cristal, la humanidad tiene el afán de progresar, conocer, abarcar mucho más los espacios, y las conductas virtuales negativas no escapan de esto.

¿Quién apaga o regula el Wifi?

La infodemia es una palabra hoy muy de moda, acuñada por la OMS y validada por la RAE vía twitter el 7 de abril del 2020 ante la consulta de una usuaria, prueba de la inmediatez que tenemos los humanos para comunicarnos con instituciones que antes sólo teníamos en la biblioteca de casa o de la escuela, los llamados “diccionarios”.

La realidad es que mucho antes que el Covid atravesará este planeta, la infodemia ya existía,  el exceso de información que tenemos a nuestro alcance es casi ilimitada, la posibilidad y el poder de escribir, leer sobre cualquier tema, opinar y comunicarnos con el resto del mundo, lo vivimos a diario. Los dispositivos móviles, las redes sociales, son alimentadas diariamente por nosotros mismos, comunicando e informando al mundo a donde estamos, lo que hacemos o queremos hacer, transfiriendo nuestros bienes, gestionando nuestras emociones al mundo. El internet abrió el portal de las fronteras sociales, raciales, o de credo; es la sociedad dentro de una sociedad que parece no tener límites, podemos acceder a cualquier tipo de información, cada individuo puede tener su espacio, y relacionarse con otros a la velocidad de la luz.

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