Problemática De La Energía Nuclear En México

I. INTRODUCCION

El siguiente ensayo comprende una recopilación de información y reflexión personal acerca de la energía nuclear en México y su posición, así como desarrollo y futuro.

Es indudable que el futuro energético apunta a las energías alternativas, el potencial que existe en nuestro país es favorable en ese sentido más no capaz de sustituir los medios convencionales para obtener energía eléctrica. Siendo la postura del autor la de una energía nuclear que también sea considerada como una alternativa. Como caso de estudio se toma el de la Central Laguna Verde, única nucleoeléctrica en su tipo en México, nuestro país es uno de los 3 países en Latinoamérica con presencia de plantas nucleares en su territorio.

Se traerá a flote el conflicto de un debate social y científico donde se discute el futuro de dicha energía en México.

La energía eléctrica es una forma de energía de la cual nos hemos vuelto totalmente dependientes, desde la industria, el comercio hasta en el domicilio, al grado de convertirse o en relacionarle como el motor del desarrollo de México. La energía ha estado ligada con la evolución de la humanidad desde sus inicios, desde que éste controló el fuego. Cada que el hombre ha encontrado una nueva fuente de energía o una nueva manera de sacarle provecho, ha generado un tremendo impacto, a veces positivo y algunas veces no tanto.

II. DESARROLLO

Como se exponía anteriormente el presente energético del Mundo y no solo de México parece que apunta en la dirección de las energías alternativas, sin embargo este tipo de energías no llega al punto de ser consideradas como alternativa, sino como una ayuda, una suma, al no ser capaces de suplir la demanda de energía producida de manera convencional a partir de la quema de productos derivados del petróleo. La energía nuclear debería de considerarse como la alternativa, si se busca asegurar la cobertura nacional de electricidad y el cumplimiento del Protocolo de Kioto, también un menor impacto ambiental.

Una central nucleoeléctrica es una instalación industrial similar a las termoeléctricas convencionales, con la sutil diferencia en la forma en que se obtiene a partir de la “quema” de “combustible” nuclear, en vez de combustóleo o gas natural. Decirle combustible al Uranio no es más que una analogía, porque técnicamente éste no se combustiona. La forma en que se obtiene calor para la generación es a partir de la fisión de un núcleo de Uranio 235 o Plutonio 239. Las ventajas que tienen este tipo de centrales es que constan de un sistema cerrado y muy controlado, solo tienen un ingreso de combustible, aire, y residuos por tanda, cabe mencionar que la cantidad de agua utilizada, agua especialmente tratada, se mantiene constante, y ésta no tiene intercambio de ninguna forma con el exterior.

Para que la humanidad pudiera aprovechar las bondades de este proceso, tuvieron lugar importantes descubrimientos, desde el descubrimiento de la radioactividad por Marie Curie (1867-1934), pasando por la famosa ecuación de Albert Einstein E=mc2, hasta que en 1938 Otto Hanh, Strassman y Meitner comprobaron el principio de la fisión nuclear. Desgraciadamente estos descubrimientos tuvieron como primera aplicación la bomba atómica, cambiando radicalmente el mundo como lo conocemos. En un reactor nuclear no existen las condiciones para que en dado caso éste pueda llegar a estallar como una bomba atómica, ya que apenas contiene 3.84% de combustible enriquecido, mientras que las bombas presentan alrededor del 95% que en realidad tampoco son explosivos, sino que son detonados en primera por otro tipo de explosivos dentro de la bomba.

Se dicen muchas cosas acerca de la energía nuclear, ya que es poco conocida y mucho menos comprendida, es una de las fuentes energéticas menos populares, en gran medida los argumentos en contra sin estar fundamentadas científicamente, ya que es considerada por muchos científicos como una energía verde, más no renovable. La energía nuclear junto a la hidráulica conforman las tecnologías que menos contaminan con gases de efecto invernadero. La mala fama de la energía nuclear aumentó gracias a los desafortunados acontecimientos recientes en Japón, que no han hecho más que desinformar a la población al mitificarlo, ya que es de dominio público las causas reales del accidente, que se debieron principalmente a errores en la ubicación de los generadores de emergencia situados a muy poca altura sobre el nivel del mar, ya que estos fueron inhabilitados por un desastre natural de enormes proporciones como lo fue el Tsunami.

Por eso muchos factores se toman en cuenta antes de la construcción de una central nucleoeléctrica, su localización estratégica que depende de una baja actividad telúrica, grandes cantidades de agua disponibles y roca firme para los cimientos, la de Fukushima se trataba de una instalación muy arcaica.

Quizá no haya dilema político tan lleno de dificultades como el de la elección de tecnologías energéticas aceptables. El desarrollo de la industria nucleoeléctrica mexicana es intermitente, han pasado ya 20 años desde el inicio de operaciones de la central nuclear de Laguna Verde, en Veracruz, y no parece haber indicios de un proyecto para construir alguna otra. Cabe recalcar que es la única central termonuclear en México además que la capacidad de ésta es muy poca en comparación a la de otros países. Alrededor del mundo sólo 30 países poseen centrales nucleares, que producen aproximadamente el 16% total de la energía eléctrica mundial.

Imagen 2. Central Nuclear Laguna Verde.

Fuente: Periódico El Universal 2011.

El combustible utilizado en estas centrales, es de carácter radioactivo, de ahí que implique de gran seguridad y garantías a la hora de utilizarse. Pero las medidas de seguridad desarrolladas por los físicos nucleares a partir de los sucesos ocurridos en principio en Chernóbil, en la antigua Unión Soviética, y en Harrisburg en los EEUU, como ahora se analiza el acontecimiento reciente en Japón, la seguridad de los reactores y la gestión de residuos son los retos más importantes en este rubro.

Una analogía válida sería comparar a la energía nuclear con el avión como medio de transporte, al ser el más utilizado para largas distancias por su rapidez, aun sabiendo que existe la posibilidad de accidente se continúa usando por su

...