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Reles De Sobre Carga


Enviado por   •  3 de Abril de 2014  •  396 Palabras (2 Páginas)  •  323 Visitas

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RELÉS DE SOBRECARGA

Los relés de sobrecarga bimetálicos son un grupo de protectores de motores para aplicaciones NEMA e IEC. Se diseña nuestros relés de sobrecarga térmicos para uso con nuestros contactores y contactores inversores. Nuestros relés de sobrecarga eutécticos protegen motores, controladores de motores y cableado de alimentación eléctrica contra el sobrecalentamiento debido a sobre corrientes excesivas.

Un relé térmico es un aparato diseñado para la protección de motores sobre cargas, fallo de alguna fase y diferencias de cargas entre fases.

Valores estándar: 660 V c.a. para frecuencias 50/60 Hz.

El aparato incorpora dos contactos auxiliares (NO-97-98 y NC-95-96), para su uso en el circuito de mando.

Dispone de un botón regulador-selector de la intensidad de protección. Sirva el ejemplo: In.: 1,6 hasta 3,2 A. Además, incorpora un botón de prueba (STOP), y otro para RESET.

Funcionamiento.

Si el motor sufre una avería y se produce una sobre intensidad, unas bobinas calefactoras (resistencias arrolladas alrededor de un bimetal), consiguen que un lamina bimetálica, constituida por dos metales de diferente coeficiente de dilatación, se deforme, desplazando en este movimiento una placa de fibra, hasta que se produce el cambio o conmutación de los contactos.

El relé térmico actúa en el circuito de mando, con dos contactores auxiliarles y en el circuito de potencia, a través de sus tres contactos principales.

Simbología normalizada:

FUSIBLES O CORTACIRCUITOS

Los fusibles o cortacircuitos, según se ve en la figura 1, no son más que una sección de hilo más fino que los conductores normales, colocado en la entrada del circuito a proteger, para que al aumentar la corriente, debido a un cortocircuito, sea la parte que más se caliente, y por tanto la primera en fundirse. Una vez interrumpida la corriente, el resto del circuito ya no sufre daño alguno.

Figura 1

Antiguamente los fusibles eran finos hilos de cobre o plomo, colocados al aire, lo cual tenía el inconveniente de que al fundirse saltaban pequeñas partículas incandescentes, dando lugar a otras averías en el circuito.

Actualmente la parte o elemento fusible suele ser un fino hilo de cobre o aleación de plata, o bien una lámina del mismo metal para fusibles de gran intensidad, colocados dentro de unos cartuchos cerámicos llenos de arena de cuarzo, con lo cual se evita la dispersión del material fundido; por tal motivo también se denominan cartuchos fusibles. Los cartuchos fusibles son protecciones desechables, cuando uno se funde se sustituye por otro en buen estado.

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