SISTEMAS EXPERTOS: AYUDANTES ARTIFICIALES O FUTUROS REMPLAZANTES

La tecnología ha dado pasos importantes en el desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA). Un campo importante de la IA es el desarrollo de los Sistemas Expertos (SE). Éstos actualmente vienen contribuyendo de manera importante en la industria y en el mundo de los negocios. Posiblemente en un futuro próximo los SEs podrían superar estas limitaciones y podrían convertirse en protagonistas tomando sus propias decisiones. Este posible escenario me lleva a proponer la siguiente pregunta. ¿Conviene que los SE sigan siendo excelentes ayudantes artificiales o se conviertan en futuros reemplazantes de los expertos humanos?. El presente ensayo reúne las opiniones de varios autores que han escrito sobre el tema, comparando con la experiencia aplicada en banca, para finalmente responder la pregunta que ha sido formulada.

Llegar a ser un profesional experto es el objetivo tan anhelado que tiene el ser humano cuando inicia un proceso de aprendizaje y luego lo fortalece con la experiencia durante el pasar de los años. Este anhelo podría ser frustrado si el avance de la tecnología logra resolver las limitaciones que ahora cuentan los SE. Se define a los SEs como “… sistemas computacionales capaces de emular el comportamiento de un experto…” (Moriello, 2001, p. 67). Moriello (2001) explicó además que los SEs no intentan simular la inteligencia del ser humano en todos sus aspectos, sino mejorar la calidad de las decisiones de los profesionales que no son expertos. Además sintetizó las principales limitaciones de los SE en siete características: difícil desarrollo en la transferencia de conocimientos de un experto humano al SE, aprendizaje limitado a su especialidad y al conocimiento de la época, ausencia de creatividad ante nuevos cambios, falta de sentido común, carencia de comprensión, problemas de escalabilidad y dificultad con el razonamiento temporal. Dado las limitantes descritas anteriormente concluye que los SE no podrán sustituir a los expertos humanos, pues solo fueron desarrollados para ser ayudantes artificiales del ser humano. (Moriello, 2001, pp. 67-75).

¿Es posible que con el pasar de los años, la tecnología resuelva las limitaciones de los SE indicadas por Moriello (2001) de modo de hacerlos más eficientes y más precisos que logren pasar de ser ayudantes artificiales a ser reemplazantes del experto humano?. Esa visión no es tan descabellada, pues es posible resolver las limitaciones de los SE. Según Quintanar (2007) resumió algunas implementaciones que prometen un futuro exitoso a los SE como: los avances en el área de la Inteligencia Artificial Distribuida (DAI), el cual dispone de SE modulares que cooperan entre sí y con los expertos humanos. Se pronostica que los SE resolverán problemas de diferentes dominios. Llegarán a reconocer el lenguaje natural, con ello podrán adquirir conocimientos tanto de la estructura superficial así como de la estructura subyacente a un problema. Se implementarán Redes Neuronales en los SE, con ello podrán aprender mediante su interacción con el entorno (volviéndolos flexibles). Habrán interfaces inteligentes, integrándose con otros dispositivos haciéndolo completamente autónomos del operador humano. Habrá SE con visión artificial, que en combinación con el reconocimiento de patrones permitirán que se vuelvan más precisos y confiables.

Los SE irán evolucionando,

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