TIC como herramienta educativa.

Especialización en Administración de la Informática Educativa. Universidad de Santander-UDES. Grupo 42. Presencial, Bogotá. Estudiante: Nelson Enrique Torres Ochoa CC. 79862113 de Bogotá. Módulo: TIC como Herramienta para la Informática Educativa. Profesor Consultor: William Alberto Canro Pinzón. Ensayo.

La docencia en Colombia: entre señalamientos y desafíos

“En todo el mundo, las tecnologías de la información y las comunicaciones están generando una nueva revolución industrial que ya puede considerarse tan importante y profunda como sus predecesoras. Es una revolución basada en la información, la cual es en sí misma expresión del conocimiento humano.

Hoy en día, el progreso tecnológico nos permite procesar, almacenar, recuperar y comunicar información en cualquiera de sus formas (oral, escrita o visual), con independencia de la distancia, el tiempo y el volumen. Esta revolución dota a la inteligencia humana de nuevas e ingentes capacidades, y constituye un recurso que altera el modo en que trabajamos y convivimos.”

Europa y la sociedad global de la información: recomendaciones al Consejo Europeo.

Tomado en: http://biblio.uoc.es:443/docs_elec/2704.htm 24/01/01

Vivir en una sociedad de la información y en una economía basada en el conocimiento requiere que los jóvenes posean una amplia gama de competencias TIC para que puedan considerarse como ciudadanos idóneos participando asertivamente en distintos escenarios. Sin embargo, el mundo educativo debe enfrentar fuertes desafíos interdependientes si se pretende que las escuelas se transformen en entornos de enseñanza mediada por TIC además de que exploten el gran potencial que poseen para enriquecer el aprendizaje.

Los mecanismos y estrategias que adopte la intervención pedagógica deben estar regidos por un principio general: la acción didáctica debe partir del diagnóstico, de los conocimientos previos del estudiante; pero no para quedarse en este punto, sino para avanzar mediante la construcción de aprendizajes significativos en el sentido que marcan las intenciones educativas. Para que ello sea posible, se requiere que el maestro conozca además de los propósitos y contenidos, cual competentes son los estudiantes en determinada área para acceder a ellos de forma tal que sea capaz de aproximarse a la interpretación que estos poseen llevándolos progresivamente hacia lo que establece el currículo. En definitiva, se hace necesario que el profesor intervenga activamente en el proceso de enseñanza y aprendizaje, tanto en la fase de planificación y organización del mismo como en lo que se refiere a la interacción educativa con los estudiantes.

Parte de los conocimientos previos de los estudiantes actuales es suministrada por los datos que brinda la Internet,  pero no solo emplea este recurso para adquirir información. En la actualidad  esta herramienta es un  medio de comunicación, socialización y trabajo; primordial en la vida de los jóvenes educandos. Por esta razón es necesario hacer uso de este recurso para acercarnos con los elementos formativos y educativos,  motivantes y reales para el contexto en que se desenvuelven; haciendo más significativo su proceso de aprendizaje.

Dadas las condiciones económicas, sociales y políticas en las que se ha venido desarrollando el ejercicio docente en Colombia en el último tiempo, se han difundido a través de importantes medios de comunicación como la Internet trabajos informativos que contrastan el crecimiento de la  economía local con el bajo desempeño académico de sus educandos en áreas fundamentales como Lengua Castellana y Matemáticas (Linares y Bustamante, 2013).

En varios casos a la vez, como los artículos periodísticos publicados por la redacción de la sección Vida De Hoy en la versión electrónica del diario El Tiempo fechados entre el 03 y el 04 de Diciembre del año 2013, se señala en forma recurrente a los profesores como los directos responsables de tan lamentable realidad (REDACCIÓN VIDA DE HOY, 2013).

No obstante, dicha conjetura es rebatible si se tienen en cuenta las conclusiones del trabajo investigativo conducido por Gómez donde se establecen ocho causas que generan bajo rendimiento, dentro de las cuales únicamente dos están asociadas a la calidad de los educadores.

Tan precipitado argumento parece desvanecerse aún más al analizar los resultados de otra publicación que señala que “(…) los factores que determinan el bajo rendimiento académico en escolares están relacionados con aspectos de las categorías de historia escolar, historia familiar y estado de salud del niño con bajo rendimiento” (Enríquez, 2008).  

Asimismo, otro artículo periodístico sostiene que existen otros factores asociados al fracaso escolar además de lo concerniente a la formación de los docentes y presenta una corresponsabilidad de todos ante tal situación (REDACCIÓN VIDA DE HOY, 2013). Otros personajes a su vez asumen una posición conciliadora y hacen un llamado a la reflexión, como es el caso de la directora del Instituto Colombiano para el fomento de la Educación Superior –ICFES- (REDACCIÓN VIDA DE HOY, 2013, 06 de Diciembre).

Finalmente, hay quienes aducen problemas actitudinales como la falta de responsabilidad y compromiso de los educandos como los causantes de tal situación. De manera tal que ésta disputa se convierte en un asunto de nunca acabar.

Sin embargo, una actitud favorable y menos facilista podría ser la de indagar por asuntos trascendentales tales como los factores necesarios para que se dé una enseñanza de calidad e innovadora en el país. A muchos, especialmente a los padres de familia y funcionarios administrativos les parece inverosímil que si bien algunos estudiantes cuentan con recursos tecnológicos para su proceso de aprendizaje, no logran evidenciar un buen rendimiento. Cabe agregar que el hecho de posibilitar el acceso a la información no garantiza una enseñanza eficaz, ya lo expresaría Cabero (2002): “(…) su utilización se está centrando en el terreno de la información y no del conocimiento” cuyas “(…) consecuencias están asociadas con el escaso avance en el potencial educativo y comunicativo así como la amplia brecha entre el dominio de estudiantes y el de los profesores”.

Es decir que, no basta con entregar en lugares apartados de la geografía nacional o a personas en condición de discapacidad computadores y tabletas en forma gratuita. Se debe garantizar el acompañamiento pero principalmente asesoría a los usuarios de dichas herramientas; ya que en el rol del docente en el acto instruccional está basado en un modelo de enseñanza tradicional como se deduce a continuación:

La enseñanza aún se dirige tercamente con un énfasis a la adquisición de conocimientos, entiéndase información. El trabajo de los cursos todavía se realiza obedeciendo a una lógica que ha sido decantada del desarrollo disciplinar y académico, pero no del desarrollo armónico natural del niño y del joven. (Chona, 1998)

...