Television

La televisión en nuestro país, tiene un alcance estratosférico, ya que llega a cualquier hogar en nuestras familias mexicanas.

Constantemente se observan comunidades marginadas, en las cuáles la población realmente es de escasos recursos, pero la mayoría cuentan con un televisor. Es parte de nuestra cultura, de nuestra educación y es el medio al que mas se le invierte tiempo en nuestra vida cotidiana.

La televisión en México ha tenido un estancamiento, es decir, está descansando en una zona de confort, puesto que nuestra sociedad no le exige un cambio en los contenidos de sus programas.

Día con día hay transmisiones que en vez de fomentar los valores, parece que quieren llegar a la destrucción de la sociedad. Constantemente se ven programas demasiado violentos, que poco a poco nos van haciendo indiferentes ante éstos temas. Es decir, es tanta la violencia que se ve hoy en día en televisión, que ya ni las noticias nos asustan.

Asimismo, se presentan telenovelas repetitivas, con la misma historia una y otra ves. Dentro de éstas telenovelas se encuentran contenidos dramáticos, en donde se muestran familias descompuestas y desintegradas, es decir, una madre divorciada, los hijos sin la atención de sus padres, los amantes entrometiéndose y deshaciendo vidas ajenas.

Con esto nos deberíamos preguntar, ¿hacia donde queremos llegar?. Realmente a las televisoras, como lo son Televisa y TvAzteca, por mencionar las de mayor influencia, les preocupa la consecuencia que tiene el presentar como modelo a esas prototipo de familias en nuestra sociedad. ¿Se han puesto a analizar que la mayoría de nuestros niños mexicanos invierten por lo menos mas de una hora frente al aparato televisor y de ahí obtienen gran parte de su educación?

Por otro lado, la televisión en México se ha contaminado de intereses escondidos. Detrás de cada noticia, de cada programa, hay una intención política o de las élites que intentan mantener apaciguado al pueblo mexicano.

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