ACOMPAÑAMIENTO DE ENFERMERÍA DURANTE EL PROCESO MUERTE DEL SER HUMANO UNIDAD 1

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA

DE MÉXICO

ESCUELA NACIONAL DE ENFERMERÍA Y OBSTETRICIA

INGRESOS POSTERIORES AL PRIMERO (IAPP)

ACOMPAÑAMIENTO DE ENFERMERÍA DUARANTE EL PROCESO MUERTE DEL SER HUMANO

UNIDAD 1

PARTIR DE LA EXPERIENCIA PERSONAL

ASESOR DE ASIGNATURA

LD. PSIC. VERÓNICA BAZÁN

ALUMNA

GRUPO: 9624

FEBRERO 2016

 Actividad Integradora

• Refiere, de acuerdo con tu propia experiencia, una situación con un paciente moribundo o el fallecimiento de algún pariente cercano, que te permitió reflexionar sobre el proceso de la muerte. Indica de qué manera este evento transformó el significado que tiene para ti la muerte.

Personalmente comencé a reflexionar sobre el proceso de la muerte cuando tuve como paciente a un familiar cercano, es ahí cuando me percato de mi falta de conocimiento sobre el tema; y es que como familia cercana ellos piensan que por tener una profesión como lo es la enfermería lo sabemos todo y en realidad no es así. Con la carga de trabajo que existe en el instituto no te das el tiempo necesario para reflexionar sobre el proceso de la muerte hasta que lo vives de manera particular.

Al tratar a mi familiar realmente me sentí muy confundida porque realmente cuando es un familiar cercano con el que compartí la niñez se me dificultaba asimilar la situación y es que ¿cómo puedo aminorar su sufrimiento cuando él ya sabe que no hay vuelta atrás?. Los primeros días fueron realmente difíciles ya que el evitaba el tema, realmente se mostraba como una persona fuerte a pesar de su corta edad; eso realmente me desconcertaba ya que al compartir nuestra niñez yo sabía que él estaba asustado y no quería tocar el tema por miedo a estallar en llanto y preocupar aún más a su mamá y hermana. Después de unos días lo confronte junto con mi hermana de una manera muy pacífica y es que no puedes llegar y decir que todo mejorara cuando ya se sabe que la persona esta desahuciada.

Al comenzar la plática le reiteramos  que lo queríamos mucho y que no se preocupara por su madre y hermana ya que como familia nos apoyaríamos siempre, posteriormente la plática fue profundizando un poco más y como es de esperar comenzaron los llantos y las preguntas sin respuesta como: ¿Por qué yo?, ¿Qué hice mal?, ¿Esto es un castigo?. En ese momento solo pudimos darle palabras de apoyo, espiritualmente no pudimos ser de mucha ayuda ya que  en nuestra familia no somos muy afectos a la religión y en ese momento lo único en lo que podíamos pensar era en cómo hacer menos difícil la situación para nuestro familiar, su madre y hermana. Después de platicar un largo rato con el logramos brindarle un poco de calma, pero personalmente yo me sentía muy mal.

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