Análisis De "Los Cuatro Acuerdos"

Este libro me gustó mucho porque relata la cosmovisión que debería tener un ser humano para estar en equilibrio personal, teatral, diferencial, emocional, mental y social. Para lograrlo según el Dr. Miguel Ruiz se debe, primeramente, entender que todos los humanos tienen un complejo sistema de creencias adquirido por influencia social y familiar y, que muchas veces algunas creencias adquiridas los perturban mental, emocionalmente y los vuelven infelices; segundamente, aprender que se puede modificar el sistema de creencias para conseguir el anhelado equilibrio interior que lleva a la felicidad. Para lograrlo, se puede poner en práctica los cuatro acuerdos, sé que de este modo se puede obtener un equilibrio en la vida.

Primeramente se puede decir que es un libro el cual su principal tema es la Superación Personal, ya que el autor aconseja poner en práctica “cuatro acuerdos” que nos pueden llevar a tener un equilibrio en nuestras vidas, en el ámbito personal, emocional, mental y social. Para lograr este equilibrio, nos habla que debemos entender que el ser humano tiene creencias que son adquiridas por influencia familiar, y nos puede perjudicar emocionalmente hasta volvernos infelices. Pero también nos habla de poder modificar el sistema de creencias para conseguir el equilibrio y lograr la Felicidad.

El libro está basado en experiencias cotidianas que el autor nos menciona como ejemplos, pero de una forma que al lector se le haga fácil recordar. Se habla de la conciencia como un Juez que nos dice que es lo que está mal y nos hace reflexionar de los altibajos en nuestros días. Es importante mencionar los acuerdos que el Dr. Miguel Ruíz nos aconseja llevar a cabo.

1.- "Sé impecable con tus palabras".

En éste primer acuerdo, se nos habla de que es muy importante la forma en que nos expresamos, ya que las palabras tienen una fuerza que podemos descargar sentimientos ó energía de tal forma que se puede afectar a quien recibe tales palabras. Principalmente es “el poder de la palabra”. No hay que dar nada por supuesto, si se tiene una duda hay que aclararla; si se sospecha sobre algo hay que indagarse, porque el “suponer” hace que uno invente historias y pensamientos que sólo envenenan el alma y que no tienen fundamento.

Éste es mi acuerdo principal, ya que después de analizar un poco las letras del Doctor Miguel Ruiz, llego a la conclusión, que lo que en verdad nos quiere decir o hacer saber es la tremenda fuerza y poder que tienen las palabras, ya que el hablar no solo se reduce a un acto, es una liberación de energía la cual puede ir cargada de cierta manera ya sea negativa y positiva y afectar a quien la recibe; cuántos de nosotros al escuchar una buena pieza musical nos transportamos a diferentes lugares y esto a causa de que la música y los sonidos son energía.

Así las cosas, el autor en este llamado acuerdo, hace hincapié en el poder de la palabra, pero más que eso hace referencia a las consecuencias que puede esta causar debido a la forma o intención con que sea mencionada, pero más importante aún la forma en que el receptor la tome; es decir es malo ofender, pero mas malo aún es el aceptar la ofensa y creerla es la materialización que su busco al ofender. La impecabilidad de nuestras palabras nos llevará a ser inmunes frente a otros ataques dentro de nuestro circulo social, y viviremos sin ataduras, sabremos rechazar la basura que las demás personas quieran echar en nosotros, viviremos plenamente de ataduras. Sin embargo, también podemos utilizar la impecabilidad de nuestras palabras para trascender en el tiempo, ya que las personas que reciban nuestros mensajes lo recordaran por siempre, si nuestras palabras son de amor y de seguridad, los receptores podrán empezar a ser impecables en sus palabras.

2.- "No te tomes nada personalmente".

No permitir que las ofensas nos afecten en nuestra vida, nos dice el autor que es bueno no tomar la ofensa como algo personal, debe de pasar por nosotros sin afectarnos, hace una reflexión y menciona que el hecho negativo o la ofensa en sí misma, proviene de una persona que sufre. Lo que sale de nuestra boca es el reflejo de lo que realmente somos cada uno de nosotros. Si no honramos nuestras palabras, no nos estamos honrando a nosotros mismos; y si no nos honramos a nosotros mismos, no nos amamos, honrar nuestras palabras es ser coherentes con lo que pensamos y con lo que hacemos, lo cual nos lleva a ser auténticos y ha darnos a respetar ante los demás y sobre todo ante nosotros mismos.

Éste acuerdo es consecuencia directa del primero, partamos de nuestro ejemplo que toma a la ofensa para funcionar, al decirla uno desprende cierta energía, la cual de llegar a cumplir su cometido nos afectará y nos hundirá más en nuestra ya difícil vida, pero si como lográramos como dice el autor: no tomárnoslos personalmente, ésta ofensa solo pasar inadvertida sin afectarnos, y para lograrlo el autor hace una reflexión y nos menciona que el hecho negativo o la ofensa en sí misma, proviene de una persona que sufre o fue acondicionada por no soportar o para rechazar la situación o a la persona que ofende. Es decir si alguien le dice a otro que es un tonto por decirle a una chica que la quiere o por abrazarla, tal vez en el hogar de aquél lo reprimieron en ese aspecto.

Cuando aprendamos a no tomarnos nada personalmente, empezamos a vivir sin miedos, a amar, y no habrá lugar para emociones negativas. Si no tenemos ninguna de estas emociones, lógicamente nos sentiremos bien. Por consiguiente, cuando pierdes todos los miedos, empiezas a decidir por ti mismo y no por lo que los demás quieren que decidan, Dices si o dices no sin importar lo que puedan llegar a juzgarte ni

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