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Aristoteles


Enviado por   •  15 de Septiembre de 2014  •  503 Palabras (3 Páginas)  •  224 Visitas

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La Virtud: Según Aristóteles, la virtud es un modo de pensar y de sentir que se mantiene en el justo medio entre el exceso y el defecto; este justo medio puede ser conocido por la razón, y quien lo conoce, como el sabio, obra en consecuencia y es feliz; pues, la felicidad no es sino la actividad de la vida conforme a la razón.

La Moral: "disposición voluntaria adquirida (hábito) dirigida por la razón y que consiste en el término medio entre dos vicios".

La Felicidad: Para Aristóteles la felicidad es el “bien supremo”, el fin al cual están destinado todas nuestras acciones, el objetivo de la vida de los seres humanos. El nombre de “bien supremo” ya nos indica que hay otros inferiores a él. En efecto Aristóteles jerarquiza los bienes, pero todos ellos, toda acción, están destinados al superior, son medios que nos llevan a el, por tanto, esta cadena de medios y fines es limitada, de lo contrario, si no tuviéramos un objetivo final, la vida carecería de sentido.

La Verdad: Veía la verdad como una "realidad" y como una "adecuación del intelecto a la cosa". La verdad como realidad para él era "lo que permanece, lo inmutable, lo que siempre es de la misma manera. La forma que se halla tras el velo de la apariencia y lo que de verdad merece el nombre de ser. por otra parte, veía la realidad como una adecuación del intelecto a la cosa y lo explicaba señalando que un enunciado es verdadero si lo que dice se corresponde con aquello de lo que se habla, si hay "adecuación del intelecto a la cosa", entendida la cosa, como lo existente más allá del sujeto e independiente de él.

SANTO TOMÁS

La Virtud: Es un hábito o disposición estable de las facultades del alma, gracias al cual ésta puede alcanzar más fácilmente los fines que le son propios. Es decir, disposición para obrar bien. Estos hábitos del alma se adquieren con el ejercicio y la repetición, y por ende nos llevan a la realización de la vida buena. A diferencia del intelectualismo moral, y siguiendo a Aristóteles, Santo Tomás consideró que para la conducta buena no es suficiente que la razón nos enseñe correctamente el deber, además es preciso que la facultad apetitiva esté bien dispuesta mediante el hábito de la virtud moral. Dado que en el alma humana encontramos el entendimiento y las facultades apetitivas (la voluntad y el apetito inferior), y que las virtudes son perfecciones de dichas facultades, entonces, podremos encontrar dos tipos generales de virtudes: las intelectuales y las morales.

La Moral: Según Santo Tomás, perfeccionan las facultades o potencias apetitivas, en tanto las inferiores o apetitos sensibles, mediante estas virtudes nuestras facultades apetitivas se inclinan hacia lo conveniente y conforme al juicio de la razón. Es la repetición de los actos los que provocan en nosotros la aparición de los hábitos o disposiciones estables,

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