Biologia.

“El hombre no es un cuerpo que es un cosa, ni un alma que también es una cosa. El hombre es un drama”.

Desde siempre ha existido una pugna entre el materialismo y el espiritualismo, entre aquellos que consideran que el ser humano se reduce a un conjunto de reacciones bioquímicas que dan como producto final LA VIDA. Y los otros, los espiritualistas, que consideran al ser humano fundamentalmente como producto de un “soplo de vida” de un ser utrtasuperior.

Cada quien da su versión y trata de probarla dentro de su razón.

Lo cierto es que el ser humano es una entidad muy compleja, tanto física como mentalmente. Pero, vale preguntarnos ¿Qué es más importante, saber producto de qué somos o saber cómo vivimos?

El cuerpo humano está formado por células, tejidos y órganos y eso siempre será así. De igual manera, tenemos una parte mental –emocional-psicológica a la que llaman espíritu y eso también, siempre ser así.

Lo realmente importante para el ser humano, lo trascendental, es la presentación diaria de lo que somos, sea en el lugar, en el trabajo, en la escuela, en la sociedad. Importa más la calidad de la persona que somos para nosotros mismos y para los demás..

Nuestra vida diaria no es un cuento o una narración, es enfrentar a cada momento los retos de la vida, es dar cada paso para forjar nuestro destino. Somos lo que hacemos y no lo que pensamos expresarnos.

Por ello, debemos centrar nuestra atención en ser cada día mejores personas, mejores padres mejores esposos; debemos tratar de ser los mejores actores de nuestra propia vida… eso sí, sin engañarnos a nosotros mismos.

“KANT SENTO A LA RAZÓN FRENTE AL TRIBUNAL DE LA RAZÓN.”

Se da por cierto que la razón, entendida como capacidad para pensar y discernir, es una de las características fundamentales del ser humano; que dicha razón les permite madurar, ser conscientes y tomar las mejores decisiones. El ser humano razona y luego decide. Pareciere que la razón lo es todo, que es infalible, que deberíamos aferrarnos 100% a ella; pero, la razón absoluta no existe, pues lo que podría ser razonable para uno, podría bien no serlo para otro y es más, podría ser hasta perjudicial para estos últimos. Ejemplos en las vida diaria hay muchos: jefes versus empleados, estado versus terrorismo, esposo versus esposa, padres versus hijos, etc., etc. La razón es la capacidad para discernir, para analizar, para ver con claridad las cosas, esa razón, es tan perfecta como lo es el ser humano. Y depende mucho de éste; de la formación que haya recibido en casa, de la educación que le hayan brindado los docentes y los valores que haya aprendido de la sociedad. La razón depende de cada persona que haga uso de ella, Por tanto es también falible.es por eso que muchas veces pensamos mucho en algo, razonamos, tomamos una decisión y al final, nos lamentamos no del beneficio

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