CHUN CHAN

Asunción es total desprendimiento

de uno mismo

y desear siempre a Dios en el servicio,

es buscar su fe, su reino, su palabra

y en las almas solo a él.

Asunción es la fe siempre ardiente,

siempre firme,

esa atmósfera que envuelva nuestras vidas

una fe que nos transforme totalmente

y nos de un amor nuevo para Dios.

Tu eres el todo Señor mío,

por TI para ti mi vida entera,

Tu eres el único motivo de mi adoración.

El mundo no es grande Señor mío,

para este amor que llevo dentro,

porque el celo y el amor

Nunca dicen basta, jamás dirán basta, Jamás

Somos herederos ( herederos)

abramos el surco, y sintamos

el peso de la tierra ( BIS)

Sí Maria Eugenia, hija soy tuya

Hija soy de la Asunción

Se me ha marcado el corazón

Con tu presencia y desde el alma

Me nace esta canción.

Voy a pintarme el corazón de morado

Jesús, María la Iglesia mi pasión

Haré del lema solo Dios mi emblema

Porque en mi vive por siempre la

ASUNCION.

Llevame donde los hombres

Necesiten tus palabras necesiten ¿Qué?

Mis ganas de vivir,

Donde falte la esperanza,

Donde falte la alegría simplemente

Por no saber de ti.

Simplemente, por no saber de ti.

Eres el camino que se ha forjado

Con las huellas y las corrientes

De cada generación.

Senda que nunca podrá borrarse

Pues sus pasos se han marcado

Impulsados por la fé.

Eres parte activa de nuestra historia

El punto de referencia

Que no se puede olvidar,

Porque te has escrito letra a letra

Con la mano en la esperanza

Y la tinta del amor.

Asunción, cien años en el continente, llevando esa antorcha ardiente de la educación.

Asunción, siempre presente en nuestras vidas, como ese solo de cada día

Asuncion, Asunción, Asunción…

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