CUENTO AMOR, ENSAYO

Introducción

El cuento nos narra la historia de Ana en uno de esos días tan extraños que cualquiera de nosotros pudiéramos tener, ella una señora dedicada a su hogar, tan entregada a su familia de momento vive una experiencia emocional tan inquietante, que puede perderse en imaginar o en el tratar de buscar respuestas a sus tantas inquietudes. Con emociones nunca antes sentidas ni vividas en solo un instante conoció un mundo lleno de maravillas, pero a la vez con algunos miedos, su corazón siempre dispuesto a sorprenderse en cada momento, ella siempre dedicada a su hogar, y su familia, manteniendo la casa tan pulcra, tan armoniosa, con los hijos buenos y educados, y que muestra con los años de trabajo una estabilidad solida, tanto en terreno económico como en el afectivo, el trabajo diario y una rutina tan detallista funcionan como la firme convicción de su vida.

AMOR

La historia de Ana esta mujer entregada a su familia, dedicada a su hogar y la que siempre su objetivo principal era la felicidad de su familia, conservando una casa llena de detalles realizados por ella, muy satisfecha de sus logros como madre y como esposa, se esconde en una cotidianeidad cuidando muy meticulosamente todo lo que le rodea pero en el fondo Ana siempre había tenido necesidad de sentir la raíz firme de las cosas y eso sorprendentemente le había dado un hogar y por caminos torcidos había venido a caer en un destino de mujer, con la sorpresa de creer que ella había conseguido ese mundo con el poder de su imaginación pero el hombre con el que se había casado era un hombre de verdad, sus hijos eran hijos de verdad, eso no lo había imaginado, eran creaciones ciertas. Pero de momento comenzó a darse cuenta que también sin felicidad se puede vivir, que hay personas que parecen invisibles a las que nadie toma en cuenta y que con el simple hecho de existir ya eran motivos para aprender de ellos y tenía la curiosidad de saber como esas personas podían manejar su vida tan relajadamente. Como aquella tarde cuando la casa ya estaba vacía sin necesitar de ella, sus hijos y su esposo en sus propias ocupaciones, ese era el momento perfecto para tomarse el tiempo y observar que en la casa se quedaba todo perfecto, muebles limpios, todo en orden, eso le confortaba bastante para poder salir y emprender su rutina para realizar sus compras como todos los días, tomaba el tranvía que la llevaba al lugar que ella había elegido para hacer sus compras, pero justo en una de las paradas tomo peculiar atención a un ciego masticando chicle, lo observo tanto que hasta pareciera que lo estaba mirando con odio, pero no era eso, simplemente Ana se asombraba de ver como esa persona ciega podía masticar chicle en la oscuridad, sin mostrar sufrimiento y con los ojos abiertos, lo miraba y lo miraba porque le sorprendía como al hacer los movimientos al masticar su chicle le daba una apariencia de sonreír y lo observaba tanto que hasta se olvido que el tranvía tenía que seguir su camino y por distracción termino arrollada y las compras que había realizado terminaron todas regadas en el piso, ella mostró una expresión en el rostro que desde hace mucho tiempo no había mostrado, se encontraba toda incierta e incomprensible, los pasajeros le ayudaron a recoger sus compras pero se daba cuenta como había ocasionado la risa en varios

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