Cabello de elote

Cabello de elote

        Mauricio Magdaleno        

El mayor Rodríguez

Capítulo X

Rodríguez consiguió hacerse del el hotel, que pertenecía a don Ceferino Galas, a bases de engaños, lo que el pueblo vio mal y comenzaron a condenarlo por sus actos. Después de un tiempo vendió el hotel a un  precio muy elevado.

Doña Aurora, la esposa de Rodríguez, llego al pueblo al escuchar todo lo mal que hablaban de su esposo, le confeso a este lo angustiada que estaba sin tratar de ocultar la ira que sentía por dentro a causa de lo que había escuchado, por suerte don Braulio estaba ahí si no las cosas no hubieran salido bien entre ellos, aunque Aurora no hizo mas pues como “buena mujer” debía hacer todo lo posible por conservar la buena apariencia de su familia a pesar de las adversidades. De Florentina no dijo nada a pesar de saber todo lo que se rumoraba de ellos, Rodríguez solo contesto a su enojo diciéndole que no debía dejar que sus amigos la vieran así.

Se organizo una gran fiesta, con los mejores guisos, Florentina, cuca, y Angela también asistieron. Alguien platico con doña Aurora de las relaciones amorosas entre Florentina y su marido, ella se lleno de ira y humillación, al encontrarla Rodríguez intento convencerla de que entre ellos no había nada pero fue en vano, Aurora anuncio que si Florentina iba al día de campo que se había organizado se ira junto con sus hijos a donde nunca los encontraría.

Rodríguez pensó porque no podía tener a Florentina pero aun así conservar su relación conyugal después de todo a muchos le había resultado.

En una ocasión Florentina y Aurora se encontraron frente a frente, la cuarentona comenzó a insultar vulgarmente a la interpelada, a lo que ella simplemente respondió con una mirada acusadora llena de desprecio y se marcho. El pueblo hablo de eso por días.

En el día de campo se presumía próximo a cancelarse pues doña Aurora se había marchado pero finalmente se realizo. Rodríguez invito a Florentina a ir con el, esta acepto, platicaron un largo rato, y él aprovecho para decirle que se iría con ella a donde quisiera, pero la interpelada le dijo que hasta que el fuera libre podría considerarlo.

Una  mujer llego a saludarlo, aunque él desconocía quien era, bailaron durante un momento. Rodríguez tuvo relaciones con esta chica imaginando que era Florentina. Al amanecer partió a Uruapan, se rumoreaba mucho los motivos de su viaje y al regresar se supo que el mayor se había divorciado. El chisme estuvo en boca del pueblo durante días hasta que fue oficial, el mayor se casaría con Florentina  

Capitulo XI

Se encargo un hermoso vestido de novia para Florentina y además de doña Estefanía nadie se opuso a la boda seguramente por que no les convenía.

Don Braulio enfermo súbitamente. Alonso Lastra y don Regino llegaron al pueblo este ultimo se dirigió a casa de Florentina y después de charlar un buen rato con doña Estefanía se limito a desear la felicidad de Florentina y de su matrimonio agregando que le daría un regalo de bodas. De ahí se fue a casa de don Braulio que se encontraba en cama, Mercedes, su hija, estaba llorando al pie de su cama renegando de lo injusto de la vida pues su padre había sido un gran hombre y no se merecía eso porque mientras él estaba enfermo otros, como Florentina y Alonso se querían a escondidas, Rodríguez lleno de ira se marcho. La secretaria de la Congregación fue a avisarles a casa de doña Estefanía donde esta se limito a despedirla de la forma mas violente añadiendo que no quería volverla a ver en su casa.

Cuca, Angela y Alonso llegaron a visitarla, él le dijo que ahí estaba que si no se acordaba de él, se inmiscuyeron en una conversación referente a la boda de Florentina y el mayor, en ese momento llego la noticia de que don Braulio había caído en la agonía, el licenciado Lastra, Rodríguez y don mateo se marcharon de prisa, mientras los jóvenes decidieron salir a dar una vuelta, Alonso no desperdicio el tiempo y de inmediato saco a relucir sus comentarios negativos sobre su próximo matrimonio diciendo que seguramente no duraría y mucho y preguntándole si en realidad quería al mayor, ella le contesto fríamente que si lo quería y que el mayor era mas hombre que muchos que presumían serlo. Angela, Cuca y Lucha querían ir a casa de don Braulio, Florentina por su parte no quería ir, por lo cual la dejaron en su casa, Alonso dejo a su novia, a su hermana y a Lucha en casa de don Braulio y como el solo era un visitante no tenía la responsabilidad de asistir. Al visualizar a doña Estefanía en la estancia de la casa vio la oportunidad de visitar y estar a solas con Florentina. Al llegar se acercó a ella y le confeso que lo único por lo que había vuelto a Parácuaro era ella, estuvieron un largo momento ahí y luego Alonso se despidió con un apasionado beso. Unos minutos después llego doña Estefanía.

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