Cada día Es más Costosa La Educación Superior En Colombia
Enviado por cmlopera • 11 de Septiembre de 2012 • 1.977 Palabras (8 Páginas) • 679 Visitas
Mientras que el gobierno se obsesiona con aumentar, como sea, la cobertura ampliando cupos, las matrículas para acceder a la educación superior suben muy por encima del salario mínimo y se favorece la deserción.
Entre 2007 y 2012 el salario mínimo subió en un 30.66%, y el promedio de las matrículas subieron en un 44.42%.
www.universidad.edu.co presenta el estudio de valores de matrículas de los más tradicionales pregrados del país.
Si la educación superior no fuera un buen negocio, en cuanto a demanda de potenciales estudiantes, las IES difícilmente aumentarían sus matrículas.
Mientras que en 2012 se pueden conseguir electrodomésticos, telefonía celular, artículos importados y hasta vehículos a precios similares e inferiores que hace cinco años, el costo de la educación superior sigue subiendo muy por encima del salario mínimo legal vigente.
En 2.007 el salario mínimo era de $433.700, y en $2.012 de $566.700, lo que representa un aumento del 30.66%. En ese mismo periodo de tiempo el valor promedio de una matrícula de un pregrado tradicional en las IES colombianas subió en 44.42%, siendo arquitectura el pregrado que más ha subido, en un 54.45%, seguida por odontología con un 53.55%. Estos promedios aplican, especialmente, a las IES privadas, pues las públicas tienen más restricciones y presión social para elevar matrículas y, por el contrario, algunas han debido bajar.
Para 2.0012 el MEN sugirió a las IES un aumento del 4.02%.
Contaduría pasó de ser uno de los pregrados con menos incrementos en 2007 a uno de los de mayor incremento actualmente. Se ubica con un promedio de 47.86%.
De los 17 pregrados analizados, el que menos ha subido, en promedio, ha sido Biología, con un 35.52%, que sigue siendo superior al aumento del salario mínimo legal vigente. Curiosamente, este pregrado era uno de los de mayores incrementos en 2007.
Los programas analizados son: Administración, Arquitectura, Biología, Comunicación Social, Contaduría, Derecho, Economía, Enfermería, Fisioterapia, Fonoaudiología, Ingeniería Civil, Ingeniería de Sistemas, Ingeniería Electrónica, Ingeniería Industrial, Medicina, Odontología y Psicología.
Aunque esto no es un estudio del 100% de las instituciones y programas del sistema, sí refleja claramente las tendencias de precios entre programas de formación profesional, y toma los precios que las universidades oficialmente publicitan en medios de comunicación y sus páginas web. El valor de matrícula indicado incluye el valor que, por aparte, cobran las IES por derechos de inscripción, que no son opcionales. Así mismo, dentro del proceso algunas IES generan beneficios económicos para ciertos estudiantes.
Aunque, en general, la tendencia ratifica que las universidades con mayor renombre social son las que tienen más altos costos de matrícula y están acreditadas en alta calidad, no hay una relación directa entre calidad y valor de matrículas, pues se hallan algunas sorpresas en universidades tradicionales (es decir, con muchos años en el medio), que no tienen programas de calidad y cobran como si los tuvieran.
¿Por qué esta situación?
El mismo Estado patrocina esta situación. Su control es mínimo y la legislación es blanda. Hacia 1993 la entonces ministra de Educación, Maruja Pachón de Villamizar, estableció que el índice de precios al consumidor -IPC- era el criterio para fijar los valores de los derechos pecuarios de las universidades privadas y solicitó que todo incremento por encima de ese parámetro debía ser justificado plenamente ante la Dirección General del Icfes (hoy el Ministerio), para efectos de poder comprobar que dicho incremento responde a la atención de los objetivos del servicio público educativo. No obstante, según el Decreto 110 de 1994 y la Resolución 5150 de 2005 las IES que hayan incrementado o pretendan incrementar el valor de los derechos pecuniarios por encima del índice de inflación del año inmediatamente anterior, deberán presentar un informe que contenga la justificación precisa de los factores en los que se fundamenta el aumento. Es decir, el mensaje parece ser: suba por encima del IPC, si puede defenderse en el mercado.
El IPC es el índice que se obtiene de comparar los precios de un conjunto de productos (conocido como "canasta" o "cesta") a partir de una encuesta permanente de presupuestos familiares (también llamada Encuesta de gastos de los hogares), que una cantidad de consumidores adquiere de manera regular, y la variación con respecto del precio de cada uno, respecto de una muestra anterior. De esta forma se pretende medir, mensualmente, la evolución del nivel de precios de bienes y servicios de consumo en un país.
Generalmente el incremento del salario mínimo cada año se hace unos puntos por encima del IPC; es decir, que el aumento de matrículas es mucho más alto de lo que la norma contempla.
Como de por medio etá la autonomía universitaria y la dificultad de comprobar los argumentos de las IES, basta simplemente con que el rector o representante legal de la IES mande una corta carta hablando maravillas de los muchos proyectos e inversiones que se han tenido que hacer, para que se apruebe el incremento.
Bajo esta premisa, el valor de matrícula varía considerablemente, dentro de algunas IES dependiendo de si el programa es diurno o nocturno, a distancia o presencial, del estrato socioeconómico de los estudiantes o de la ciudad. Lo lamentable es que en algunas ciudades, con bajos ingresos y más desempleo, las matrículas de algunas universidades son más costosas que los de la misma IES en otra ciudad más grande.
Valdría la pena que el Ministerio revisara las argumentaciones de muchas de estas IES de años atrás, para ver en dónde están todos los laboratorios, edificios y visitas de profesores internacionales, entre otros muchos aspectos que se argumentan y argumentaron en su momento para justificar el incremento.
La gran ventaja de estos incrementos, analizó un observador consultado por El Observatorio, es que se vuelven base histórica para los aumentos posteriores, de tal manera que quedan autorizados para siempre. 1 ó 2 puntos anuales por encima del IPC aparentemente no es mucho en el valor de una matrícula, pero proyectado en el tiempo y con cientos de estudiantes se convierte en una multimollonaria cifra de ingresos adicionales para las universidades.
“Pero no sabemos a dónde se van esos ingresos”, dicen algunos docentes consultados, pues en nuestra universidad
...