Características del alumno en situación de aprendizaje

CARACTERÍSTICAS DEL ADULTO EN SITUACIÓN DE APRENDIZAJE

      En mi ejercicio como docente siempre he querido tomar en consideración que el proceso, que algunos separan con un guión y que otros prefieren colocar el conectivo “y” pero donde al fin y al cabo se utilizan las palabras enseñanza aprendizaje, es un proceso que para todos los que están involucrados no resulta igual, ya que todos los seres humanos tenemos diferentes formas de aprender y es en lo que en su momento el profesor Howard Gardner y su equipo de la Universidad de Harvard denominaron en 1983 Inteligencias Múltiples.

       En mi trabajo de tesis para obtener el título de Licenciado en Educación en el año 2001 me apasionó dicho tema por lo cual decidí aplicarlo a la especialidad en la cual me preparé diseñando estrategias para la enseñanza del inglés a través de actividades que involucraran el estudio de las Inteligencias Múltiples analizadas por el profesor Gardner. Y he traído este recuerdo a estas líneas ya que ahora me siento yo mismo identificado con dichos estudios porque los años pasaron y no soy el joven aquel de hace unos años, ya he acumulado experiencias, tengo muchas vivencias no sólo como profesional sino además en mi vida personal que me han hecho crecer no tan sólo dibujando cabellos blancos en mi cabeza sino también dándome herramientas para dar forma a las oportunidades que me sigue dando este camino que escogí seguir y que hoy me presenta la realización de esta Maestría. En este sentido, debo evaluarme personalmente ahora como adulto y descubrir que características poseo en este momento que inicio nuevamente un camino de aprendizaje y para ello empiezo a descubrir lo siguiente:

         Soy responsable de mi propio desarrollo: Hace muchos años mis padres me motivaron a estudiar, me pagaron los estudios, me comparaban  los materiales, me inspiraban con sus propias acciones y aun cuando hoy siguen estimulándome con el sólo hecho de seguir estando a mi lado soy consciente de saber que lo que siga aprendiendo o lo que siga cultivando en mis conocimientos es para crecer como individuo y aplicarlo el día de mañana en las situaciones dónde dicho aprendizaje sea necesario. Mi motivación es intrínseca y eso es lo que más me estimula a continuar en el proceso que involucra seguir aprendiendo las herramientas administrativas relacionadas con la educación.

          Conecto mi experiencia con los nuevos conocimientos, habilidades y actitudes que deseo adquirir: Estoy seguro que cada vez que consiga en este camino un nuevo aprendizaje lo relacionaré con alguna situación ya vivida y que para el momento quizás no supe solventar. Formarme es  enriquecerme y no hablo de dinero claro está, pero de que vale tener los bolsillos llenos si mi cabeza sigue vacía. Es en este párrafo se pone de manifiesta mi vena de investigador y por supuesto haré referencia a una conceptualización del aprendizaje en adultos.

          Para ello citaré lo expresado por la Unesco en la V Conferencia Internacional de Educación de Adultos (CONFITEA V), en 1977. Lo que denominaron Declaración de Hamburgo, debido al lugar donde se celebró: “La educación de adultos es el tipo de educación orientada a desarrollar estrategias que faciliten el proceso de aprendizaje en los adultos, quienes completaron o abandonaron la educación formal. Aunque la educación de adultos se encuentra en espacios informales y no formales, se fundamenta en un criterio aplicable a otros terrenos educativos: El de la formación permanente y continuada, a través de la cual cualquier persona se inserta en un proceso de aprendizaje y reciclaje de los conocimientos a lo largo de su vida”.

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