Ciudad De Crista
Enviado por GabsTMI • 1 de Mayo de 2013 • 5.490 Palabras (22 Páginas) • 272 Visitas
Parte Primera: Las Chispas Vuelan Hacia Arriba
1. El Portal …………………………………………………………. 4
2. Las Torre Demonio de Alicante ……………………...………….. 19
3. Amatis ……………………………...……………………………. 41
4. Daylighter ………………………………………………………... 54
5. Un Problema de Memoria ……………………………………….. 68
6. Mala Sangre ……………………………………………………… 86
7. Dónde los Ángeles Temen Pisar ………………..……………… 106
8. Uno de los Vivos ……………….………………………………. 126
9. Esta Sangre Culpable ……………...…………………………… 139
Parte Segunda: Las Estrellas Brillan Oscuramente
10. Fuego y Espada ……………………………………………….. 154
11. Todos los Huéspedes del Infierno ……….……………………. 169
12. De Produndis ………………………………………………….. 185
13. Dónde hay Pesar ………………………………………………. 204
14. En el Bosque Oscuro ………………………………………….. 219
15. Todo se Desmorona …………………………………………… 234
Parte Tercera: El Camino al Cielo
16.Artículos de Fe ………………………………….……………… 249
17. El Relato de la Cazadora de Sombras …………………………. 266
18.Saludo y Despedida …………………………………………….. 285
19.Peniel …………………………………………………………… 309
20.Pesado en la Balanza …………………………………………… 334
Epílogo: A Través del Cielo en las Estrellas
Pandoranium
Página 2
Pandoranium
Traducido por Aurim
PRIMERA PARTE
Saltan las Chispas
El hombre nace para el problema
mientras saltan las chispas.
Job 5:7
Página 3
Traducido por Aurim
1
EL PORTAL
La ola de frío de la semana anterior había pasado; el sol lucía brillante
cuando Clary cruzaba apresuradamente el polvoriento jardín delantero de
Luke, la capucha de su chaqueta levantada para guardar su cabello de saltar
volando por su cara. El tiempo podría ser cálido, pero el viento del East
River podía ser todavía brutal. Llevaba un ligero olor químico mezclado
con el olor a asfalto de Brooklyn, gasolina, y azúcar quemada de la fábrica
abandonada de la calle abajo.
Simon estaba esperándola en el porche delantero, tirado en una rota
butaca de primavera. Él tenía su DS haciendo equilibrio sobre las rodillas,
en vaqueros azules, y estaba golpeando laboriosamente con el stick.
-Puntuación –dijo él cuando ella subía los escalones–. Estoy pateando
culos en Mario Kart.
Clary se bajó la capucha, revolviéndosele el pelo sobre los ojos, y
rebuscó en el bolsillo las llaves.
-¿Dónde has estado? Te he estado llamando toda la mañana.
Simon se puso de pie, empujando el rectángulo parpadeante en su
cartera de mensajero.
-Estaba en casa de Eric. Ensayos de banda.
Clary paró de mover la llave en la cerradura –siempre atascada– lo
suficiente para mirarlo con el ceño fruncido.
-¿Ensayos de banda? ¿Quieres decir que tú todavía…
-¿En la banda? ¿Por qué no estaría? –Él llegó a su altura–. Ven, déjame
a mí.
Clary aún parada allí mientras Simon giraba la llave con habilidad de
experto, justo con la cantidad adecuada de presión, logrando abrir la vieja y
persistente cerradura. Su mano rozó la de ella; su piel estaba fresca, la
temperatura del aire en el exterior. Ella se estremeció un poco. Ellos habían
terminado su intento de relación romántica hacía sólo una semana, y
todavía se sentía confusa siempre que lo veía.
-Gracias –Ella recibió la llave de vuelta sin mirarlo.
Hacía calor en la sala de estar. Clary colgó la chaqueta en el perchero
del hall y encabezó la marcha hacia el dormitorio de invitados, Simon
siguiendo su estela. Ella frunció el ceño. Su maleta estaba abierta como la
concha de una almeja sobre la cama, su ropa y cuaderno de bocetos
desparramados por todas partes.
Pandoranium
...