Contexto Global

El periodo positivismo, el estado le asigna un papel, “el educador de una doctrina positiva”, donde la doctrina positivista surge al triunfo del liberalismo donde resalto sus principios fundamentales.

Ya que el positivismo lo tenían definido como la corriente de pensamiento que da nueva forma al liberalismo, este triunfa en término político por que enfatiza la necesidad del orden sobre los derechos y las libertades.

Las consignas combativas deben dejar su lugar al orden constructivo, la cual la ideología liberal como la negación se pasa a la afirmación.

El proceso de integración nacional que era limitado se desenvolvía en lo económico mediante el mercado, el desarrollo de las comunicaciones y de la economía nacional.

El primer ídolo del liberalismo el poder era Gabino Barreda, percibía que no solo se gobernaba con leyes ni amenazas o castigos.

La educación positiva se constituye en un ingrediente para conservar el poder, se inscribe una lógica de poder. Al extender su hegemonía sobre el conjunto de la sociedad, el positivismo contribuía a la tarea de unificación e integración nacionales. Sin embargo la necesidad de unificación no era necesidad percibida en el poder.

Si en conjunto la clase dominante tendía adjudicarle al desarrollo educativo a toda una serie de virtudes, sus lucidos representantes eran consiente de eficacia expandió.

Rabasa advertía que antes de enseñarle a leer al indígena, era necesario liberar a los indios de sus miserias y de las que le crea la clase superior que le rodea. Era más aconsejable mediante la construcción de camino y obra para despertar ala indio y enfrentarlo con las necesidades y exigencias de las vidas civilizadas

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