Criminología Mediática

La criminología mediática ha obtenido tanto poder en nuestra sociedad que las autoridades han intentado controlarla, convirtiéndose este control en una completa falsedad, pues hay una absoluta incapacidad para enfrentarla y se termina asumiendo una imagen de sumisión fingiendo tener el control mientras se sede a sus reclamos.

Dentro del sistema penal los jueces han asumido tal sumisión que a través de sus decisiones que deberían prevenir y sancionar las manifestaciones de violencia, terminan solo buscando protegerse de la criminología mediática pues solo tienen en cuenta el grado de peligro que puede generar una decisión de liberación o de absolución, razón por la cual se ha creado el problema de prisionización siendo la privación de la libertad la columna vertebral del sistema de penas como lo ha planteado Zaffaroni.

La privación de la libertad se ha convertido en la solución principal a los problemas de la sociedad, retomando la vida positivista donde se plantea que la única solución es encarcelar, la cual se aplica no solo a las infracciones más graves, si no que vienen abarcando infracciones de mediana y menor gravedad que terminan siendo trasgresiones ínfimas, por lo que es necesario preguntarse si la privación es la solución a delitos como hurtos sin violencia, ventas de productos falsificados y falsificación de licencias, quedando esta discusión al arbitrio de cada país.

El fundamento de este fenómeno de prisionización es acabar con el delito al privar de la libertad a los infractores, lo que realmente no ha sido una solución pues es evidente que la comisión de delitos ha incrementado, aumentando de igual manera la población en las cárceles semejándose estas a campos de concentración, donde carecen los recursos, los presos no tienen espacios propios pues son invadidos por las autoridades dentro de la prisión y se presentan masacres por goteo convirtiendo a la pena de prisión en una pena de muerte aleatoria. Aunque lo ideal sería que dicha privación se presentara solo al cometer un delito, realmente se está dando en casos donde dicho delito no existe pues se viene aplicando la medida de privación preventiva de la libertad la cual esconde una verdadera pena pues a pesar de que el supuesto infractor sea absuelto cargara con el estigma de la criminología mediática pues solo dará a conocer a la sociedad el momento de su detención, criticando su liberación o simplemente no dándola a conocer.

La prisionización también ejerce presión en el preso pues se le dan solo dos opciones, negociar con el fiscal para aceptar una pena menor lo cual es evidentemente beneficioso para el verdadero infractor, o esperar una pena mayor lo que perjudica al preso inocente pues debe esperar a obtener su libertad solo hasta el momento del juicio, lo que hace que tanto el infractor como el inocente pasen por las mismas consecuencias de una criminología mediática donde solo aquellas

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