Crisis de la ciudadania moderna

La crisis de la democracia y la ciudadanía está vinculada con las novedades presentes en el ambiente de la política puesto que esta figura de alguna u otra manera se encargado de quitarle valor de cierto modo a la democracia. No debemos olvidar que democracia y ciudadanía, siendo instituciones diferentes, son realidades profundamente interrelacionadas ya que la democracia defiende los derechos de una ciudadanía que es autónoma de elegir a sus gobernantes, de esta forma habría una relación bastante necesaria entre ellas; pero al aparecer la figura política empiezan ciertas inconsistencias que el tercer párrafo las vamos a presentar.

 Al estar produciéndose una fractura en la identidad colectiva entre el sistema político y la ciudadanía, la democracia y la ciudadanía ya no caminan de la mano, lo que puede provocar numerosas problemas. Esta crisis consiste en la falta de un equilibrio, como intercambio y funcionamiento con sentido, entre derechos y obligaciones por una parte ciudadanos y por otras del estado.

Conceptuando la democracia se dice que es un sistema político que defiende la soberanía del pueblo y el derecho del pueblo a elegir y controlar a sus gobernantes. La política es una actividad orientada en forma ideológica a la toma de decisiones de un grupo para alcanzar ciertos objetivos.  Colombia es un país con índice de corrupción que da pena decirlo, la política o los sistemas políticos se han desviado un poco de su objetivo y se han dedicado al bienestar de ellos mismos y no de la comunidad. Elegimos un gobierno corrupto que roba, que despilfarra, que impone planes o proyectos son absurdos para la sociedad, un gobierno cada vez se hace más rico y la comunidad siendo la que lo sostiene se hace más pobre. Es triste decirlo pero es la dura realidad que afrontamos los colombianos, un país donde cada vez suben más impuestos, un país donde los miembros del gobierno ganan cantidades millonarias por no hacer nada y la gente trabajadora que cultiva nuestras riquezas ganan salarios que son miserables.

“La ciudadanía ha perdido muchos de los rasgos que la caracterizaban en la edad clásica y en las sociedades preindustriales como relación equilibrada entre ciudadanos e instituciones: pérdida de visibilidad, falta de equilibrio entre lo que el ciudadano da a la comunidad y lo que recibe de ella, declinar de los circuitos de solidaridad.” Janowitz (1980).  Este párrafo revela la verdad que están viviendo las sociedades. Anteriormente había un equilibrio entre los ciudadanos y el estado, actualmente la desigualdad social que hay en el mundo es increíble, cada vez el rico es más rico y el pobre aún más pobre. Un pueblo que da mucho y recibe tan poco es un pueblo que poco a poco tristemente va decayendo. Cosas como estas son las que hacen pensar en que realidad la ciudadanía moderna está en crisis.

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