Crítica a: El canciller Evo

Crítica a: El canciller Evo

Elaborado por: Laura Andrea Justiniano Jordán

Fecha: 03 de Octubre de 2015

Ésta lectura me  tajo el recuerdo de una frase que alguna vez leí «Quien de joven no es comunista, es que no tiene corazón. Quien de viejo es comunista, es que no tiene cabeza.» Creo que por lo general, cuando se es joven e ingenuo es fácil dejarse llevar por la idea de un mundo “justo e igualitario” donde sea el gobierno que solucione todos los problemas que se vienen dándonos bonos y subsidios, entre otras cosas. El problema empieza cuando, uno se va dando cuenta que el gobierno, para financiar los bonos nos quita más de lo que nos da, desacelera el crecimiento, aumenta la incertidumbre del futuro en las familias y, por lo tanto, de todo el país.

Actualmente, no es un secreto que  los países latinoamericanos que continúan con el engaño de que el régimen socialista es el adecuado a implantarse en un país, sufren un colapso económico (en el caso de Venezuela) o están en camino hacia el (Brasil, Argentina y Chile.)

En el caso de Bolivia, que sigue la misma línea socialista pero aún no han emperorado las cosas como es el caso de los países mencionados arriba. El crecimiento de la economía boliviana ha sido evidente en los últimos años, mas no es motivo para jactarse ni usar la prepotencia contra los mandatarios de países vecinos, porque ellos, están un paso más adelante que nosotros para allá nos dirigimos y mañana veremos a los asesores de Evo tratar de explicar la crisis económica que sufre el país, mientras él se relaja en la playas de Cuba.

Adicionar a esto, que Evo Morales no se destaca precisamente por ser prudente con sus palabras. Su arremetida con la presidenta de Brasil ha sido reprochable, dado el caso que Brasil fue alguna vez la opción mediante la cual conseguiríamos salir de la mediterraneidad, y en un futuro no lejano llegaríamos a necesitar de relaciones diplomáticas favorables con el vecino país, dada la fuerte inversión que existe en Bolivia, proveniente de Brasil, sin contar el ferrocarril que “hace lance” a Bolivia, del cual podríamos habernos beneficiado, por no decir menos.

Es que, en lugar de construir puentes para el progreso, Evito está levantando muros alrededor de Bolivia, en sus no muy brillantes apariciones en la prensa arremetiendo contra quien le de la gana, sin pensar en las consecuencias, que a la larga sus palabras pueden acarrear para un país entero. Su imprudencia puede cerrarnos puertas que seguramente necesitaremos  en temporadas desfavorables, nos está cerrando las posibilidades de “solución” en caso que haber problemas.

De lo que no estoy muy segura, es que si el presidente, en su calidad de “canciller” nos aísla deliberadamente o lo hace “accidentalmente”. Pero las consecuencias de las palabras de nuestro iluminado presidente, no tardarán en hacerse notar.

...