DEBATES Y PROBLEMAS CONTEMPORANEOS EN LAS CIENCIAS HUMANAS Y DE LA CULTURA

Indira H. Aguilar Ch.

Cédula N° 8-458-157

¿Desde mi rol de qué manera puedo incidir o colaborar para superar los problemas de la justicia penal, 27 años después de su reforma?

Considerando mi rol de funcionaria del Órgano judicial de este hermoso país como es Panamá, y después de 27 años de su reforma en América Latina, como lo he podido apreciar en las lecturas y foros dados como material de estudio en esta maestría, donde diferentes autores nos  han ilustrado con el tema de cuál ha sido el propósito  de la reforma de la justicia penal en América Latina  y en cada uno de nuestros países, que no ha sido más que desplazar el modelo inquisitorial para dar lugar a un sistema fundamentado en el sistema acusatorio, debido a que para los años 80 y 90  américa latina pasaba por situaciones muy complejas hablando políticamente, y u no de los motivos de esta reforma en los  países latinoamericanos y otros países ha sido fundamentalmente cerrar la brecha  que se ha presentado entre los estándares internacionales en materia de derechos humanos y las realidades de los Estados con relación al sistema penal.

Ahora bien, creo que la manera en que podre incidir o colaborar en las problemáticas y retos antes expuestos lo constituye de primera mano el manejo adecuado del nuevo sistema, el cual se puede obtener con la capacitación permanente de  lectura, consulta y cursando estudios como esta maestría en derecho penal y procesal penal que se encuentra enfocada en el proceso acusatorio, ante todo debemos entender el alcance de  reforma de la justicia  penal y cuáles serían los objetivos trazados por la misma, lo que nos permitirá contar con un manejo adecuado del nuevo sistema penal, ejercer mejor nuestro rol dentro del mismo y exigir también el cumplimiento por parte de los demás actores, y velar porque esta reforma a la justicia   que ha empezado no deje de terminar, tal cual como lo ha sostenido ”Binder”, y más en un país como panamá donde la imagen de la reforma tiene  falencias,  que a la fecha no favorece las necesidades de la población y sobre todos de quienes en ella se han visto inmersos, y siguen considerando que este nuevo sistema no es más que una corrupción, debido a que se ha visto que el sistema ha sido creado para las altas clases sociales.  

Como colorario de lo anterior,  y como funcionaria de la administración de justicia  debo colaborar a superar esa mentalidad que mantiene la población, velar porque esa imagen que se tiene de este nuevo sistema tenga una trascendencia distinta haciendo que  se cumplan con los objetivos del sistema, que  nos es más que nada hacer que se cumpla con el respeto de las garantías y derechos humanos consagrados en nuestra Constitución Política, tratados internacionales y la propia ley y así garantizar que el sistema no ceda ante aquellas personas que trataran de trasladar practicas inquisitivas que rompan con el modelo garantista.

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