Diagnostico De Salud

INTRODUCCION

La salud es por lo común un complejo y problemático proceso, no un estado o meta a alcanzar; es decir, los procesos de salud solamente son entendibles como parte de procesos históricos, económicos, culturales y ecológicos más grandes y profundos, así como también de la actuación diferencial y desigual de distintos grupos en tales procesos.

La salud pública o comunitaria no es por consiguiente la suma de la salud de cada individuo o de alguna población, localidad o comunidad, según sean los propósitos investigativos. No es un acumulado o la media estadística, pues las condiciones de la población jamás son uniformes. La salud es, entonces, un proceso dificultoso e incierto en donde interactúan, por un lado, largos procesos históricos y, por otro lado, la participación de distintos grupos, creando así una serie de determinantes o condiciones sociales que conducen a estados o reacciones de enfermedad poblacionales e individuales, o nocivas al bienestar social.

En la Ciudad de México se han observado cambios en el proceso salud- enfermedad, hoy predominan las enfermedades no trasmisibles y las lesiones. Se ha producido una transformación acelerada tanto de los procesos riesgosos para la salud como en los indicadores de enfermedad y muerte de la población. Esta transición está íntimamente relacionada al envejecimiento de la población y al crecimiento de riesgos relacionados con estilos de vida poco saludables. Los perfiles de las enfermedades en unas y otros presentan características diferentes, algunas son particulares de su sexo, pero también hay otras que responden a las condiciones socioeconómicas, culturales y educativas en que mujeres y hombres se desenvuelven.

La transformación de los patrones de daños a la salud impone retos en la manera de organizar y gestionar los servicios, ya que las etapas intermedias y terminales de las enfermedades que aquejan a la población, demandan una atención compleja, de larga duración y costosa, que exige el empleo de alta tecnología y requiere la participación de múltiples áreas de especialidad.

El proceso de salud-enfermedad de un sujeto social se encuentra determinado por cuestiones referentes a su clase social, género, etnicidad, religiosidad; en otras palabras, está en constante determinación dentro del campo social.

Como consecuencia de tales razonamientos, el proceso de salud-enfermedad debe primeramente pasar por recuperar al sujeto social, o sea, estudiarlo a partir de su especificidad social y cultural.

Por ende, en este estudio diagnóstico sobre las condiciones de salud se parte de la base de no tener de antemano nada a prioritario. Se necesita por el contrario, la perspectiva de los vecinos, de los sujetos que viven en la colonia estudiada. Se evita con esto privilegiar una mirada de “expertos” sobre los sujetos, para así poder capturar las distintas y desiguales percepciones que tienen los habitantes de dicha colonia acerca de su salud y enfermedad.

Por lo anterior se hace necesario realizar diagnósticos de salud que son juicios de valor en torno al proceso salud-enfermedad en relación a las necesidades sentidas, expresadas y normativas de una población, así como los factores que influyen positiva y negativamente sobre este, permitiéndonos crear estrategias para hacer accesibles los servicios de salud y la información sanitaria a la población mediante la participación comunitaria y la autogestión.

El Diagnóstico de Salud hace referencia a un proyecto de investigación en materia biopsicosocial, en un área específica de la población; en este caso lo realizaremos en una de las AGEB´s que le corresponden a la Clínica de Especialidades No.6. Este estudio incluye una población de 150 familias como muestra representativa a quienes se aplicará una cédula con la finalidad de obtener indicadores de salud.

Involucrarlos en el análisis de las condiciones de salud de este AGEB nos permitirá elaborar un diagnóstico integral, permitiéndonos conocer la realidad sanitaria, con mayor capacidad de sustentar propuestas de solución y/o mejoramiento en los aspectos insatisfactorios identificados.

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

a. DELEGACIÓN CUAUHTÉMOC

La zona que hoy comprende la Delegación Cuauhtémoc tiene como origen lo que fue la Ciudad de México hasta aproximadamente, el final de la década 1920-1930.

El asentamiento originario de la urbanización de la zona se remonta a la fundación de la Gran Tenochtitlán, ocurrida en el año 1325 de nuestra era. La Ciudad sede del imperio azteca y su centro ceremonial se localizaron en el área que hoy ocupa el Centro Histórico de la Ciudad de México (CHCM), cuyos vestigios son perceptibles en la actualidad a través de las ruinas rescatadas del llamado “Templo Mayor”.

La Edificación de Tenochtitlán, centro del imperio azteca, se fincó sobre un paraje lacustre y pantanoso cuyos pobladores hubieron de adaptar para construir la ciudad imperial y su gran centro ceremonial. En esa época la urbe se componía de cuatro grandes barrios que correspondía a los cuatro puntos cardinales; a los que se agregaba Tlatelolco, ubicado al norte, considerado como ciudad gemela de Tenochtitlán. El islote de Tenochtitlán se comunicaba con las demás poblaciones asentadas en la orilla del lago a través de calzadas, cuyo trazo corresponde actualmente a las calzadas de Tlalpan, Tacuba y de Guadalupe, así como por canales utilizados desde entonces como vías comerciales. A este trazo se agregaban las áreas destinadas a la producción agrícola, conocidas como “chinampas”, construidas como islotes sobre el lago, algunas de las cuales se conservan en zonas de la actual ciudad, en las Delegaciones de Xochimilco y Tláhuac.

El conquistador Hernán Cortés y sus huestes se apostaron en los márgenes de Tenochtitlán el 8 de noviembre de 1519. El emperador Moctezuma sabía del avance de las tropas invasoras a las que esperaba con temor, por lo que recibió a Cortés diplomáticamente y le hizo valiosos obsequios y agasajos. Sin embargo, el asedio y la conquista militar de Tenochtitlán prosiguieron hasta culminar con la victoria a la postre de los invasores.

Tras la conquista iniciada en mayo de 1521 y la destrucción del acueducto que llevaba agua potable a Tenochtitlán, la nueva ciudad virreinal fue construida sobre los restos de los templos y palacios aztecas. Emitiendo los modelos urbanísticos españoles del siglo XVI y transgrediendo la lógica de la infraestructura que dotaba de servicios a la urbe mexica, el trazo general de los conquistadores consistió en un cuadrángulo reticular con calles rectas, y rodeado de acequias,

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