Direccionamiento de las politicas tributarias

EL DIRECCIONAMIENTO DE LAS POLITICAS TRIBUTARIAS Y LA INCIDENCIA DEL RECAUDO DE IMPUESTOS COMO FUNCION DEL GOBIERNO PARA MANTENER LOS INGRESOS PUBLICOS: UNA MIRADA DESDE LA EVLUCION DEL SISTEMA TRIBUTARIO COLOMBIANO.

MODULO: ECONOMÍA POLÍTICA DE LAS FINANZAS PÚBLICAS

TUTOR: FEDERICO ORJUELA MORENO

INTEGRANTES - GRUPO D    

    CLAUDIA GIMENA RINCON                                                            ALEXANDRA PAOLA VARGAS REYES                                                                      LUIS HOGGAR JANSENIO SALGADO VILLAMIL

ESCUELA SUPERIOR DE ADMINISTRACION PÚBLICA –ESAP  

           ESPECIALIZACION EN FINANZAS PÚBLICAS                                  

BOGOTA D.C.                                                                                             SEPTIEMBRE 02 DE 2015

El direccionamiento de las políticas tributarias y la incidencia del recaudo de impuestos como función del gobierno para mantener los ingresos públicos: una mirada desde la evolución del sistema tributario colombiano.

El objetivo primordial de todo sistema tributario es proporcionar los recursos necesarios para financiar el gasto público. Esto hace parte de la suficiencia del sistema tributario, y esto a su vez depende de los impuestos que se apliquen y la eficiencia de la administración tributaria (Pita, 1993). Visto así, los impuestos son pagos obligatorios que hacen los contribuyentes sin recibir a cambio contraprestación alguna, lo cual hace que en cuanto a los impuestos, la relación entre el Estado y los contribuyentes sea de tipo político. Podría decirse que el principio de la tributación consiste en que se paga de acuerdo a la capacidad de cada individuo y ésta se determina bien por los ingresos, bien por el patrimonio de las personas. Desde esta perspectiva, es importante analizar tanto la tributación desde la perspectiva de la Economía política así como la evolución del sistema tributario colombiano.

Ahora bien, el primer aspecto a considerar es que con la privatización surge una contradicción pues los bienes públicos son provistos por el sector privado, y aunque su carácter sigue siendo de bienes públicos, los ingresos obtenidos de la prestación de tales bienes y servicios no forman parte de las finanzas públicas. Giraldo sostiene que los recursos que recauda el sector privado son públicos cuando se trata de impuestos obligatorios como en el caso del sistema general de seguridad social, o cuando son bienes y servicios prestados por monopolios naturales que deben ser controlados por el Estado como los servicios públicos y la educación; estos son servicios por cuya prestación el Estado debe velar, especialmente para las personas de escasos recursos. Dado que satisfacen intereses colectivos su provisión no puede ejercerse en un mercado de libre competencia, están inmersos en un proceso político.

Al abordar los principios de la tributación, es importante anotar que la provisión de bienes públicos financiados a través de los impuestos produce en el mercado una distorsión económica con costos en términos de eficiencia, sin embargo el gobierno busca no alterar la asignación de recursos lograda de forma natural por el mercado, en aras  del principio de equidad. Las distorsiones económicas pueden aparecer por la existencia de sectores ineficientes, por la aplicación de tasas progresivas que desestimulan el ahorro y la inversión o por las exenciones y tratamientos diferenciales concedidos por los regímenes tributarios. Una estructura tributaria óptima no debe trastornar estructuras de producción, comercio, consumo, ahorro e inversión. Sin embargo no es tan simple como que la sola aplicación de los principios de la tributación lleve a estructuras impositivas óptimas, pues las reformas tributarias se tramitan en el Congreso donde se mueven intereses a favor de los contribuyentes que tienen mayor representación en este cuerpo legislativo como son las clases altas, por lo que generalmente se tiende a gravar con mayor dureza a las clases que tienen poca o nula representación.

El principio de equidad se refiere al trato igual para iguales (equidad horizontal) y trato diferente para diferentes (equidad vertical). A pesar de la progresividad de los impuestos, no opera de forma adecuada el principio de equidad vertical debido a las exenciones tributarias, gravámenes especiales, regímenes especiales. Por otro lado con la creciente privatización de los servicios públicos, la visión de la ciudadanía es la de cada vez menor retribución del Estado como proveedor de servicios públicos razón por la cual se desestimula el pago de impuestos. El principio de eficiencia se refiere a que el sistema tributario no distorsione el funcionamiento del mercado, es el caso de los impuestos progresivos que frenan el ahorro y la inversión, puesto que quienes más tienen o más ganan tienen más altas tasas de tributación. Un sistema tributario simplificado tiende a la eficiencia, pues supone menor existencia de tarifas diferenciales y exenciones tributarias. En cuanto al principio de flexibilidad, busca que las rentas no tengan destinación específica con el fin de que los gobiernos tengan mayor libertad y autonomía en la inversión de los recursos en aquellos sectores donde más se necesite.

La globalización ha influido en la política fiscal, pues ha puesto de manifiesto la necesidad de replantear el sistema tributario con miras a la inserción en el mercado internacional, en este sentido es necesario incentivar el comercio exterior, la inversión extranjera y el movimiento de capitales con disminución de impuestos al comercio exterior, a la renta y a las transacciones. Esto ha hecho que a nivel global el recaudo tributario se concentre más sobre los impuestos indirectos que sobre aquellos que gravan la renta y la riqueza. El principal tributo ha sido el IVA, adoptado por la mayoría de los países en la década de los 80 y cuya base gravable había ido en aumento, hasta la primera década del siglo XXI cuando esta tendencia se redujo, producto de las crisis fiscales desatadas en su momento y el surgimiento de gobiernos de izquierda en la región, entonces se impulsó nuevamente el cobro de impuestos al patrimonio y los activos. Igualmente se introduce la eliminación de la doble tributación tanto para los accionistas de las empresas en cuanto a los dividendos percibidos pues estos ya han tributado como utilidad de las empresas, como para las empresas que tienen presencia en diferentes países para que no paguen el mismo impuesto a la renta en su país de origen y en el país donde operan. En todos los países de la región la carga tributaria total ha aumentado de manera regular, así como la carga tributaria de las entidades subnacionales (estados, departamentos, municipios), ésta última gracias a la descentralización fiscal que apunta a su autofinanciamiento mediante el esfuerzo fiscal.

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